jueves, 16 de diciembre de 2010

Así termina el 2010

No cabe duda que nuestro México es mágico, increíble y Kafkiano y, así, estamos finalizando un año más en nuestra historia. Año de Bicentenarios y celebraciones (sin chiste), año de guerra sin cuartel (literalmente, ya que se tuvo que cambiar de la PFP al CISEN, más tarde a Gobernación, después a los Pinos, después al Ejército y, finalmente, a la Marina). Y ahora, con lo de Wikileaks, sólo sabemos que causa estrés y no deja dormir a nadie y, finalmente, vuelve Kafka a adueñarse de la situación con todos los arreglos políticos que preparan la vida electoral de los próximos dos años.

Un año de inestabilidad económica, de sobresaltos y de pleitos, pleitos por todos lados. Si fuéramos en un camión, los mexicanos le tendríamos que gritar al chofer que se fije, ya que no trae papas en el vehículo (típica queja en México), hemos subido y bajado y rebotado por todas las esquinas, las broncas del SME, las Cámaras, los pleitos entre los partidos, los asesinatos políticos, secuestros y, a pesar de todo, el país sigue caminando.

Para muestra, un recuento para finalizar el año:

Diego Fernandez de Ceballos sigue secuestrado, nadie sabe nada y, al parecer, a nadie le importa.

El Diputado Godoy por fin sale de la cajuela del coche directo a la calle, sin fuero (al cierre de este editorial, no sabíamos si volvería a aparecer). Curiosamente, todos aquellos que lo metieron en la cajuela de un automóvil para entrar a la Cámara de Diputados, hoy se lavan la cara con la ley en la mano y las pruebas de la Procuraduría para echarlo a patadas y crucificarlo públicamente. Mientras, el hermano Gobernador hace ceremonia fastuosa, no se sabe si como funeral o como acto de gobierno, en donde varios pensaron que hasta anunciaría su renuncia. ¿Y ahora quién se hará responsable de su desaparición?

En el SME, el líder ya regresó gracias al fuero que le otorga la Toma de Nota que le da el Gobierno Federal al Sindicato. ¡Claro, son muchos miles de millones de pesos en juego! Todo lo dicho ya se olvidó y todos felices (seguro ya se amarró algún negocio por ahí).

A la ex gobernadora de Zacatecas le siguen cayendo las auditorias; seguramente para el año que entra, tras un arreglito, todo el asunto se olvida y vuelve a ser la súper dirigente del partido.

El Calentamiento Global llegó a Cancún y como llegó se fue, sin pena ni gloria.
Santiago Creel quiere repetir la historia del hijo desobediente y se lanza al modo de un buen charro (de los buenos) como candidato para la grande en 2012 (a ver cómo le va, nunca ha ganado una).

Finalmente, vemos el acto de unidad partidaria en el PRI donde Moreira se queda como candidato único para la presidencia y Emilio Gamboa declina esa posición “por el bien del partido y orientado a ganar la Presidencia de México”, acción que no me lleva a otra cosa que pensar ¿Cuál es el gato encerrado en esta acción? Pero en fin, si algo tiene el PRI es disciplina y, al parecer, aprendieron la lección del 2000.

Y no sólo en México nos la jugamos de manera extraña; la Iglesia, a nivel mundial, repite su voluntad milenaria de desaparecer del mapa a todo integrante de su iglesia que hace escándalos: a Maciel lo borran de la historia, ya hasta se parecen a los mexicanos que a sus contrincantes los matan, para después hacerlos héroes, o viceversa.

Y qué decir de Wikileaks, que a pesar de que no descubrió en realidad nada nuevo, al parecer si habrá un antes y un después. Pero en fin, todo esto se ha convertido en las piedras de nuestro azaroso fin de año, en el cual ni siquiera el puente Guadalupe-Reyes le ha podido dar tranquilidad al país.

Para acabarla de amolar, y como un posible escenario para 2011, todos nuestros políticos se perfilan a jugar a la descalificación total. En el próximo año el juego será la crítica sobre el mal desempeño de todos, Calderón y el PAN iniciaron con su tartaleta de que si regresa el PRI volverá todo lo malo de los últimos setenta años. El PRI, por su parte, repetirá su propia historia sobre el PAN que habla de la década perdida y apuntará sobre todos los errores que estamos viviendo la actualidad; los del PRD dirán que ni los del PRI ni los del PAN sirven para nada y que ellos, con su gran y premiado gobierno de la Ciudad de México, demuestran su eficacia.

Lo más curioso es que esa guerra de descalificaciones sólo será, como bien decimos en México, un acto de escupir pa´rriba y les caerá en la cara a todos, ya que no hay muchos que tengan la conciencia tranquila.

Sólo me queda desearles a todos mis lectores que tengan felices fiestas en compañía de sus seres queridos y desearles el mejor de los éxitos para el 2011, esperando que el chofer del país ya no nos traiga con tanto brinco.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Todos para uno

Durante los últimos meses, he tenido la oportunidad de viajar por diferentes países de Latinoamérica proporcionando consultoría para diferentes compañías. He participado en procesos de planeación estratégica; generación de nuevos modelos de negocio; alineación de procesos de mercadotecnia; ventas, y trade marketing, entre otros.

Más allá del objetivo de cada una de estas intervenciones, una constante se encuentra presente en todo grupo de trabajo y corporación: la importancia de la comunicación como eje conductor de la solución de problemas. Parece obvio. Pero a lo que me refiero es que la comunicación resuelve problemas que se pueden pensar que son muy técnicos. Aquí algunos ejemplos.

En las juntas corporativas se desperdician horas y horas de valioso tiempo, mientras los ejecutivos no se dan cuenta que discuten de lo mismo, pero no llegan a un consenso, porque están llamando las cosas de diferente manera.

Otro caso puede ser cuando los ejecutivos se percatan que el posicionamiento de una marca no se entiende por el consumidor, porque entre lo que piensa el que diseña y el que lo lleva al mercado hay falta de entendimiento, y de ahí grandes fracasos en el mercado.

También pasa con empresa que están vendiendo productos o servicios a los clientes que no son los adecuados, porque a los de ventas nadie les había informado que ese no era el mercado objetivo; o el gobierno que reacciona ante hechos que no son confirmados y sobre reacciona públicamente, causando daño a su imagen.

Todos estos casos en los cuales me ha tocado participar, en el fondo, son problemas que, en principio, se resuelven mejorando la comunicación humana y la organizacional. Después ya entra en juego la parte técnica de cada situación. Ahí es en donde radica la importancia de la comunicación.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

WikiLeaks

Gran revuelo y escándalo social ha causado la información confidencial que difundió el portal WikiLeaks. En mi opinión, no hay noticia. Todo lo que se dice, en general, de alguna u otra forma, ya se sabía.

De esta manera, debería admitirse que las prácticas de espionaje de una potencia mundial, tampoco son nuevas. Sólo habría que darse una vuelta a un Blockbuster y escoger cualquier película de Hollywood y se podrá ver lo que se acostumbra. Es más, siempre se ha dicho que si lo que se exhibe en las películas lo hacen público, habría que imaginar qué cosas nuevas existen y no las conocemos. Cada día, ciertamente, la brecha es más corta.

Por otra parte, el hecho de que la información privada pueda ser expuesta por cualquier persona enojada, convertida en espía industrial, es grave para cualquier corporación. Por eso, es necesario entender que toda entidad organizada cuenta con información confidencial que a ojos de cualquier ciudadano y sin el contexto adecuado puede resultar vulnerable y delicada.

Resta pensar el asunto desde la teoría de la conspiración. Preguntarse si no es un golpe interno de Estados Unidos en contra de la administración de Obama.

Si bajo este contexto, el asunto sirve como un pretexto para desatar una guerra mundial, no nos debe asombrar, ya que las grandes conflagraciones han empezado por asuntos menos importantes. Basta recordar la Guerra de las Pasteles, que puso a México y Francia al borde de un conflicto bélico.

El periodismo responsable siempre checa sus fuentes y las versiones con los involucrados, cuando recibe un determinado tipo de información filtrada. Aquí se está debatiendo, también, el uso y la veracidad de la información que se maneja entre los medios y las redes sociales. Las empresas deberán preparar escenarios de crisis, ya que es posible que este ejemplo se propague bajo el pretexto de la transparencia ciudadana.

jueves, 2 de diciembre de 2010

El mal de México

Ahora, con el Bicentenario, se recuerdan las historias de la Revolución. Una de ellas es la que cuenta que Emiliano Zapata, estando en Palacio Nacional frente a la silla del presidente dijo: “La silla presidencial está embrujada; cualquier persona que se sienta en ella, se convierte en mala”.

El domingo el presidente Calderón y el PAN organizaron un acto para celebrar el cuarto año de su gobierno, en fastuosa ceremonia donde reunieron a diez mil panistas; conmemoraron, además, diez años de la llegada de su partido a Los Pinos. Las arengas de celebración fueron enfocadas a exteriorizar que el PRI es el causante de todas las desgracias de nuestro país.

Si Zapata renaciera y hubiera estado en el Auditorio Nacional, como aquella vez en Palacio, seguramente podría decir: “La Presidencia en México está embrujada y cualquier partido que llega a ella pierde la razón”. Claro, después de esto moriría nuevamente del berrinche.

Al parecer, en México la política es la que está embrujada. Cualquier partido que llega al poder se empieza a comportar de una misma manera, ve su mundo solamente, todos los anteriores son los malos de la película; no importa que lleve diez años en el poder y se está comportando igual, no importa tampoco que en esos diez años no haya podido cambiar al país y a sus funcionarios, no importa ya de qué partido sean, están cayendo en actos de corrupción igual o peor que el partido que gobernó en 70 años.

Es verdaderamente inverosímil que el partido en el poder trate de atacar a su antecesor haciendo lo mismo que ellos, diciendo lo mismo y no siendo consciente de sus grandes errores. No es posible que el partido en el poder pueda decir este tipo de arengas, cuando ha venido perdiendo la mayoría de las elecciones en los últimos dos años a manos del partido que tanto critica y no es posible que no puedan ver que la situación de los ciudadanos sigue igual que en los tiempos del PRI.

Con gran tristeza, lo único que me hace pensar es que es un problema que está enraizado en el mexicano, que va más allá de los partidos políticos, que es una desgracia nacional que se manifiesta en estos diez años del PAN, o en los 70 anteriores del PRI, o en los pocos que lleva el PRD en algunos estados. La práctica de la política es la misma, la corrupción, la búsqueda del beneficio personal, la defensa del dogma partidista sobre los intereses de la ciudadanía y de México, y que, por ambición al dinero de los impuestos y al poder mismo, se puede caer en decir cualquier cosa, aunque se repita el uso, para atacar al enemigo político, las mismas tácticas que ellos utilizaron durante muchos años.

Lo he repetido en varias ocasiones y, por desgracia, lo vuelvo a decir: la alternancia en México no ha tenido efecto, no ha servido de nada, porque nuestros políticos, sin importar cualquier partido, terminan haciendo lo que el molde del político mexicano, en gloriarse en el poder, decir verdades a medias, creerse su propio discurso, no ver la realidad del país y menos asumir que hubo errores y corregirlos.

Ejemplos tenemos a diario, lo que pasa con el diputado Godoy y su supuesta relación con el narco, las excesos de Amalia García en el Gobierno de Zacatecas y que ahora, por arte de magia, quiere jugar para la gubernatura del DF sin tener la residencia; o qué decir de AMLO, Juanito, los asesinatos de candidatos a gobernadores o de ex gobernadores, en fin, como dijera la frase de un antiguo cómico, “qué bonita familia”. Ésa es nuestra triste realidad.

Ahora que terminan las tan peleadas y mentadas celebraciones del Bicentenario, con una profunda tristeza se puede decir que en la actitud de los políticos no ha cambiado nada. Ahora que recordamos nuestra historia, vemos que seguimos igual, la lucha en el poder es encarnizada y se usan las mismas tácticas de siempre, no hemos avanzado mucho que digamos.

Hoy, el país está detenido por el egoísmo de los políticos, por su falta de visión; no hay liderazgo real, ni visión de Estado. Y lo peor es que, a 200 años de la Independencia y a cien de la Revolución, nuestra política tiene los mismos débiles fundamentos humanos. Ése es el mal de México.

Con esta lección se cierran las celebraciones del Bicentenario y los diez años de alternancia.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Cuando el servicio mata el servicio

En la cadena de restaurantes Vip´s y El Portón, en días y horarios pico, el servicio al cliente, mata al servicio en general. El domingo pasado en uno de sus establecimientos, al llegar a pagar, había una larga fila en la caja. El motivo, la pobre cajera tenía que hacer tru-tru con el manejo de las promociones, que son muy buenas, pero que son terribles en su manejo al momento de pagar. En estas situaciones es cuando una excelente promoción, se convierte en una pesadilla de servicio: en un domingo en la mañana con el restaurante atiborrado o en cualquier Vip´s a la hora de la comida.
Es muy importante que las áreas de mercadotecnia cuando diseñen las promociones cuiden su implementación. Sobre todo, porque al momento de realizarlas llegan a ser una pesadilla para los clientes y entonces, con o sin ella, éstos salen gritando o enfurecidos por la tardanza a la hora de pagar, o cuando un hijo quiere inscribirse en una iniciativa de esta naturaleza y también se convierte en algo imposible de lograr.

El dilema claro, es encontrar lo que quiere el consumidor con las promociones, si descuentos, premios o simple y sencillamente que exista calidad en los alimentos, un buen servicio y salir tranquilamente. Por supuesto, sin hacer cola de siete u ocho personas y es que en ocasiones tarda más tiempo en la caja que degustando los alimentos.

Hoy, para la cadena Vip´s es un verdadero reto el control de su éxito, para que este no dañe el servicio, ya hubo un gran momento cuando automatizaron la toma de las comandas. Ahora, el nudo se pasó a las cajas en horas pico. Seguramente, alguna solución tecnológica les puede ayudar.

Otra cadena que sufre de un problema similar es en Sanborns, que tiene años con el mismo sistema de comandas y de pago en sus cajas. Grandes retos tienen las cadenas de comida rápida para que el servicio no los dañe.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Antihéroe mexicano

Pocas veces ha existido en México el que exista algún caso de antihéroe, no es común en nuestra cultura. Lo que se permite son héroes que se fabrican desde el poder y como consecuencia, además son los únicos que entran a la historia y a la cultura; influye también el peso que les dan los medios, si el caso les importa para sus fines coyunturales y para presionar, entonces sí les importa, de otra manera simplemente lo desaparecen del mapa.

El héroe, tradicionalmente es personaje con características especiales de fuerza, habilidad o convencimiento propio, que toma, con altos principios morales, una causa en sus manos y lucha incansablemente en combatirla para lograr un bien a la sociedad.

El antihéroe no tiene ninguna de estas características, normalmente es cualquier ciudadano que cansado de ser presionado por circunstancias de denigración, abuso, delincuencia y corrupción, en un momento determinado, cansado y para defender sus bienes personales, se enfrenta a situaciones que parecen imposibles y que normalmente lo supera, pero lo enfrenta con una valentía increíble y desafortunadamente con consecuencias trágicas para su persona, de ahí el mote de antihéroe.

Estas personas hacen actos de una valentía inverosímil y en la mayoría de las veces actúan con más valor y entrega que un héroe mismo, lo que me trae a la mente la película de Clint Eastwood llamada Gran Torino, donde el personaje, entiende que con su muerte es la única forma de hacer que la justicia reaccione favorablemente a la causa que él defiende.

En México acaba de darse el caso de anti heroísmo, un empresario en el norte del país fue presa de criminales que lo asediaban para quitarle su rancho y a través de amenazas de muerte, esperaban que abandonara su rancho y con esto poder quitárselo, como ya lo habían hecho con todos sus vecinos. Don Alejo Garza Tamez, hombre de 77 años, decidió defenderse y sacando a su familia del rancho decidió enfrentar sólo a los criminales, matando a cuatro e hiriendo a dos más, antes de caer abatido y fallecer en la defensa de su propiedad, por el escándalo llegaron las autoridades y no se consumó la toma del rancho.

Este hecho sucedido el sábado pasado, llamó la atención de la sociedad en el ciberespacio y las redes sociales, ha sido muy comentado y estuvo como una gran noticia en algunos medios y hoy una gran parte de la población lo está tomando y declarando como un héroe. Ciro Gomez Leyva, en el periódico Milenio, comentaba que ya le decían el “Héroe del Bicentenario”, y estoy muy de acuerdo con él, aunque la familia niega que haya sido así, obviamente por el dolor de su pérdida, y desde aquí mis respetos a ese gran hombre que fue su padre.

Este asunto tiene varias aristas que debemos analizar, primero en los medios de comunicación se está diluyendo el asunto, lo que demuestra que las mismas autoridades no quieren que se difunda el caso, seguramente por el miedo a que se siga el ejemplo y la gente se arme y tome la ley en sus manos, lo que generaría una ley de la selva. El problema para el Estado es mucho ya que de por sí, no controla a la delincuencia y ahora no controlar a las personas, sería algo grave.

La segunda arista, es el hecho de que los medios de comunicación tampoco le han seguido dando difusión al asunto, y puede ser con petición expresa del gobierno, por lo que prefieren seguir haciendo sus concursos de buenas obras que ahondar en una terrible historia de cansancio e injusticia que se repite en muchos municipios controlados por la delincuencia y en donde la autoridad esta borrada del mapa. Los medios en su afán de usar la delincuencia como ariete para golpear al gobierno, empiezan a ser socios invisibles del ambiente delincuencial, a pesar de tener sus propios casos de heroísmo que han terminado en desafortunadas y deplorables muertes.

Y, si comparamos este caso contra la cultura estadounidense esa es la pequeña gran diferencia, en Estados Unidos, el caso se habría hecho famoso, causas ciudadanas lo habrían extendido como un ejemplo, y Hollywood ya estaría haciendo una película de esta persona, para que en un arranque de indignación social, tratar que la justicia tome cartas en el asunto. La cultura estadounidense adora este tipo de historias, sirven para reciclar a su sociedad y la justicia, las refresca y crea una conciencia social y lo usan como un arma de las guerras corruptas de la sociedad.

En México este tipo de historias nadie las quiere, a nadie le interesan, y lo peor, a nadie le conviene. El status quo del crimen organizado parece que a nadie le conviene resolverlo, lo que fuerza a los que lo sufren diario a tomar solución desesperadas en sus propias manos, con la estúpida consecuencia de perder la vida o que en caso dado a ellos si les sean aplicadas las leyes, por eso se les considera antihéroes.

En su memoria Don Alejo, sí, si es usted un héroe de esta estúpida guerra de corrupción.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

El poder de la comunicación

Hace algunos días tuve la oportunidad de dirigir una sesión de planeación estratégica para definir el modelo de negocio de una empresa utilizando técnicas de innovación. En cierta parte del ejercicio, el grupo se dividió en grupos pequeños en donde cada uno trabaja elementos del modelo de negocio y se tomarán decisiones que cambiarían el rumbo de la organización. En una sala de juntas con 14 personas se organizaron cuatro grupos.

Lo curioso es que aunque estaban todos en el mismo salón, cada grupo empezó a tomar decisiones sin avisar o consultar al resto de los participantes. Cuando todos empezaron a reportar su parte del trabajo, se dieron cuenta que por falta de información y nula comunicación, las decisiones tomadas habían sido las equivocadas.

Unos clamaban que nadie les había avisado, otros preguntaban el por qué los demás grupos no habían informado, etcétera, etcétera... Así, surgieron todas las típicas excusas y recriminaciones normales en este tipo de situaciones. Si esto pasa entre un número pequeño de ejecutivos en un salón de juntas, ¿Puede imaginar lo que sucede en una corporación más grande o en una empresa multinacional? Al final, todos los participantes entendieron que, para que los negocios fluyan adecuadamente, debe existir una buena comunicación.

Lo interesante del ejercicio es que se entendió que el principio básico de la comunicación en los negocios empieza en cada una de las personas que laboran en la empresa y que es un problema de voluntad el hecho de comunicar. Es importante tener en cuenta que en este proceso, que supuestamente es natural en el ser humano, se ven involucrados múltiples factores, empezando por la emoción, el olvido, el ego, la flojera y llegando hasta el propósito de no comunicar por una intención determinada.

Hoy, en el mundo de los negocios, este factor humano es uno de los principales frenos o cualidades para el logro de los objetivos empresariales. A este grupo de ejecutivos les quedo muy claro el impacto de la comunicación en el futuro de su negocio, con un simple ejercicio en una pequeña sala de juntas.

jueves, 18 de noviembre de 2010

La cultura de “el bueno”

En días pasados escuché a un político decir que él no era “el bueno”, refiriéndose a que su candidatura para un puesto determinado no tenía el apoyo del gobernador en turno, pero que iba a luchar para obtener los votos y ganar la contienda. Por otro lado, en un caso que pareciera contrario, otro candidato decía que su candidatura estaba en riesgo, porque los dirigentes del partido central, al parecer, ya habían pactado otra cosa, pero que él iba a ganar porque tenía el apoyo de los ciudadanos.

Esto me hizo recordar que hace algunos años, antes de la alternancia en la Presidencia de la República, participando en una campaña política, me salí a caminar por la calle con la intención simplista de escuchar al vox populi, y cuando preguntaba en la calle a la gente o a los taxistas por quién iban a votar, curiosamente siempre obtuve la misma respuesta. Su voto sería por el candidato que, efectivamente, iba al frente en las preferencias y la sorpresa vino al preguntar el porqué (la respuesta siempre fue la misma): porque es “el bueno”.

Ahora, al escuchar esto de nuevo, en 2010 y de boca de políticos, confieso que me asombró un poco ya que, por alguna razón equivocada, hubiera creído que en el tránsito democrático de México, esta forma de pensar se perdería. Ahora me doy cuenta de que esta cultura sigue muy arraigada en el mexicano, y lo más peligroso, es que sigue arraigada en los políticos mexicanos.

¿Qué implica esta cultura de votar “por el bueno” o “ser el bueno”? Desafortunadamente, nuestra democracia aún no se abre a los verdaderos causes de dar oportunidad a los ciudadanos para participar, no solamente como candidatos a una elección natural, sino que, con el sistema de partidos políticos que tenemos, los puestos de elección popular siguen de la mano del amiguismo y de la componenda, todo motivado por querer seguir anclados al poder por el mayor tiempo posible.

Esto impacta al país en general, ya que otra interpretación que le puedo dar es el hecho de que el mexicano, en el fondo, no le gusta perder y, sin ningún reparo en que si el candidato es bueno o no, simple y sencillamente vota por “el bueno”, para poder decir cuando el candidato gane, “yo sí voté por él” y sentirse partícipe de ese triunfo.

Pero, ¿qué pasa cuando el candidato en cuestión, ya siendo gobernante, falla o empieza a hacer locuras típicas de nuestros políticos y sistema gubernamental? Todos se deslindan de ellos y nadie les hace caso ni se hacen responsables de sus acciones. Recuerdo, también hace algunos años, una campaña de calcomanías en los coches que decían “yo no voté por fulano”, en un afán de deslindarse de cierto político y, de paso, dañar al partido al que pertenecía.

El mexicano sigue siendo un adolecente democrático que no quiere tomar riesgos sobre sus decisiones. A pesar de lo que digan los partidos políticos, la cultura política concebida en la posrevolución por el partido que gobernó a este país por más de setenta años fue la forjadora de las prácticas y costumbres actuales, que no han podido ser erradicadas por el avance democrático.

Por otra parte, nuestros partidos políticos, por lo menos los tres más grandes, los cuales ya gobiernan y participan en las grandes decisiones políticas y democráticas de México, no han mostrado ningún avance en este aspecto. Todos han caído en las viejas y arraigadas prácticas de la política nacional, que no cambia. Hoy, vemos gritos y sombrerazos al viejo estilo revolucionario en las disputas partidistas del PAN, del PRD y qué decir del PRI, que fue la cuna de todo lo que hemos vivido.

Desafortunadamente, ante este panorama, no podemos echarle la culpa solamente al PRI o a los políticos, es un problema de nuestra cultura nacional: nuestra gente no quiere y no está acostumbrada a ejercer sus derechos, ni obligaciones, y aún es una cargada de votos que escuchan las voces de la esperanza que cada elección les ofrecen las sirenas de la política. Salvo sus honrosas excepciones, todavía nos falta mucho para verdaderamente tener una mejor democracia.

Ojalá la próxima vez que usted vote, no lo haga por “el bueno”. Mejor hágalo por quien usted crea que nos puede llevar a enfrentar los retos de un futuro con muchos desafíos y cambios.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Asuntos Públicos

La materia de Asuntos Públicos ha tomado día a día su importancia en el ámbito de los negocios en México. Es preciso decir que existe una clara diferencia entre un área de comunicación corporativa, una de relaciones públicas; a pesar de que en un momento dado asuntos públicos puede conjuntar a las otras dos, pero tiene una función muy especifica.
En México hay una tendencia en la cual las áreas de relaciones gubernamentales, de comunicación corporativa y en algunos casos hasta las jurídicas, se han instituido como de asuntos públicos. Esto es muy importante porque de donde evolucionaron es lo que marca la visión y que es necesaria complementarla, ya que el juego perverso de la política, el gobierno, la sociedad y los medios cada día se complica más, y con la visión de las áreas de donde nacen o provienen, no alcanza para atender los requerimientos.
En algunos casos las empresas deciden crear departamentos de Asuntos Públicos en donde contratan a alguien que trabajó en el gobierno, porque su pensamiento principal es la relación o ventas con las autoridades.
Los asuntos públicos son mucho más que todo esto que acabamos de describir. Son áreas muy especializadas que cuidan el balance entre la empresa, las autoridades y la sociedad. Para desarrollar su función utilizan una serie de herramientas como el análisis político, la planeación estratégica, la administración de proyectos, la prospectiva, la mediación, la negociación, el cabildeo, la comunicación, el manejo de crisis, el control de daños y las relaciones públicas.
Ahora con el caso de los laboratorios que vivimos la semana pasada, se demostró que la perversidad del juego político actual, obliga a que las áreas de Asuntos Públicos deban de ser de especial cuidado, atención e importancia. Y es que según como se reveló, estamos ya en casos de espionaje industrial y por naturaleza son el foco de atención de los medios de comunicación.
Las empresas deben entender además, que esta disciplina es la puerta principal de la ética, transparencia y rendición de cuentas, por lo tanto, los funcionarios que estén al frente, como ven, deben de poseer un perfil muy especializado.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Viejos vs. Jóvenes

En el fondo de nuestro sistema social, económico y político, estamos presenciando un cambio generacional, lo que significa un enfrentamiento entre las viejas generaciones y las nuevas ideas de los jóvenes. Esto es muy significativo dentro del contexto de la situación mundial, ya que es un factor que incide en la lucha por el poder en todos aspectos.

En la política, estamos viendo que en todos los partidos uno de los principales factores es que los jóvenes quieren desplazar a las viejas generaciones, las antiguas mentalidades y, por supuesto, a las viejas prácticas, protocolos y costumbres de poder.

Lo que hoy vemos en el PAN, es parte de ese juego. Las nuevas generaciones, gracias a su dinamismo y más rápida adaptabilidad a las situaciones mediáticas, a las tecnologías de la información y el contacto con los jóvenes ciudadanos a través de las redes sociales, pueden estar ganando en contra de la parsimonia política de los dinosaurios panistas. Curiosamente, en ese partido tenemos que hay casos, como el de los dos últimos presidentes que por exceso en su juventud han cometido algunos errores, pero hoy se repite la historia en un partido en donde la juventud es la que empuja a los más viejos del partido. Aún no se ve quienes son los ganadores al final de la contienda.

En el PRI, qué decir, la nueva ola de la política representada por Peña Nieto, Ivonne Ortega y algunos otros de los nuevos gobernadores que rayan entre los 28 y 35 años, están naturalmente en contra de los grandes dinosaurios como son Salinas, Madrazo, Beltrones y Beatriz Paredes. Al igual que en el PAN, la lucha por el control del partido ya se desató y Moreira, un político de corte juvenil, está logrando más que los grandes tiradores a esa posición como fueron Ulises Ruíz de Oaxaca o Fidel Herrera de Veracruz. El verdadero enfrentamiento se dará si se mantiene Moreira en contra de Emilio Gamboa, otro gran dinosaurio priista de largos y grandes colmillos en la labor partidista.

En el PRD, la situación es parecida, aunque no con el mismo calibre de enfrentamientos. A otro nivel la lucha, de AMLO contra Marcelo Ebrard es otro nivel de edad, aunque Marcelo es más joven, los dos representan a la misma camada política; técnicamente son contemporáneos y pasa lo mismo con Jesús Ortega, todos son coetáneos, políticamente hablando. Para el caso de la Ciudad de México, quien da la batalla por los jóvenes es la Diputada Alejandra Barrales, que se menciona para dirigir el gobierno o para liderar el partido en el DF.

Curiosamente, en el mundo del narcotráfico está pasando lo mismo, parte de lo que estamos viviendo no sólo es un reacomodo en las pandillas por la supuesta guerra, sino que también es un cambio generacional obligado, los viejos capos están dejando los puestos a las nuevas generaciones de narcotraficantes.

En los negocios y en los medios, pasa algo similar. Las nuevas generaciones están desplazando a las cabezas empresariales y a los líderes de opinión y, más que en otras épocas, debido los avances en las tecnologías de la información y a los efectos de esta tercera revolución industrial, las generaciones de personas de mediana edad en adelante están sufriendo un retiro involuntario o un tipo de segregación de la vida, por la velocidad y avance tecnológico.

Hoy, estas generaciones batallan día a día para reaprender de los negocios, la política y la misma vida social, los nuevos códigos que impone la vida moderna y, de alguna u otra manera, son un factor que también está generando presión a la vida social, política y económica.

Las nuevas generaciones están imponiendo a velocidades muy aceleradas y nuevos códigos de actuación en todos los ámbitos, por lo que las viejas generaciones, aún en el poder, pelean por mantener sus tiempos, códigos y viejas prácticas.

Innegablemente, los jóvenes ganarán y en todos los ámbitos, hasta en el de política pública, ya se empieza a percibir que los tiempos de reacción de las generaciones del poder ya no están generando soluciones eficaces a los problemas. Hoy, las decisiones de un Estado moderno para todos los ámbitos, tanto sociales, como económicos, requiere de decisiones y tiempos de respuesta que las antiguas generaciones no están acostumbradas.

En cualquier sucesión de las principales posiciones en una empresa, institución o Estado, hoy se debe de pensar si la persona que va quedar al frente para dirigir y tomar las decisiones para un periodo supuesto del 2012 al 2016, tiene la visión y el entendimiento de los jóvenes de esa época y si está capacitado para enfrentar y entender las situaciones que se vivirán en esos momentos.

Por supuesto, en muchos casos la resistencia de los viejos es muy grande pero, irremediablemente, en esta lucha siempre ganarán los jóvenes.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

La reputación del dinero

La revista Forbes ha sido durante muchos años una de las publicaciones más prestigiadas en el mundo del dinero y de los negocios, pero de un tiempo a nuestros días, algo está pasando. Su famoso indicador de la lista de los hombres más poderosos y ricos, en mi opinión, y por lo que he visto en los medios de comunicación, empieza a tener mala reputación. Al leer la noticia de hace algunos días en los periódicos, en donde el encabezado de la nota decía Slim y el Chapo Guzmán. Sí, el narco, en la lista de los hombres más poderosos de México y Latinoamérica. Esto me lleva a pensar que mientras en nuestro país se lucha una guerra en contra el narcotráfico, una revista internacional valida a un delincuente como un hombre poderoso ocupando la posición número 41 de la lista; Slim se encuentra en la primera.

No acabo de entender cómo llega el Chapo a esta lista, cuando nadie sabe en dónde está. Es buscado por todas las policías y, supuestamente, no tiene cuentas bancarias, ni propiedades, ni empresas que sean públicas y por medio de las cuales realmente se pueda calcular su poder, dinero o fortuna.

Desde mi humilde opinión, creo que la revista Forbes, empieza a perder su reputación como medio, ya que, sin ningún dato validado, incluir a este tipo de personas en su lista deja mucho que desear respecto a las formas de hacer su ranking o escoger a las personalidades para incluir. Lo peor de este asunto, es que los humanos nos acostumbremos, por la fama que le está dando un medio, a no distinguir entre lo que es un negocio malo o bueno. Hablamos de una actividad en dónde se involucran asesinatos de personas, no sólo el daño a la salud.

Para ellos, al parecer, solamente les interesa el poder y el dinero, que en una sociedad con tantos problemas y crisis financieras globales, sólo me lleva a pensar que en este nuestro mundo la reputación del dinero, está, en verdad, por los suelos.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Revés demócrata

En mi última visita a Estados Unidos, hace algunas semanas, tuve la oportunidad de hablar con varias personas, pero me llamó mucho la atención dos pláticas entabladas con taxistas, uno de origen argentino radicado en la zona urbana de Washington, y el otro, un estadounidense de mediana edad y que vive en una población a una hora de esta ciudad, centro de la democracia estadounidense. Dos visiones distintas, pero que ya en sus comentarios auguraban la debacle del partido demócrata en EU.

El taxista argentino me contaba cómo, en los últimos años, se había incrementado el odio hacia los latinoamericanos en Estados Unidos, esto derivado básicamente de dos cosas: por primera vez los estadounidenses estaban compitiendo por los trabajos a los que antes sólo los latinos aspiraban y, en segundo lugar, y ante este primer efecto, la actitud del inmigrante de hacer gestos en donde quiere replicar el estilo de vida de su ciudad natal y, por ende, no respetar las leyes americanas, ni el all american way, hace que los estadounidenses, hoy más que nunca, aumenten su racismo y odio por todo lo que represente una cultura extranjera.

Me contaba casos de los típicos puestos de comida o carritos de hot dog; ya hasta son mal vistos y agredidos por las mismas comunidades, y no sólo por asuntos de higiene y manejo de alimentos, sino que ante el desempleo, tratan de hacer comida y venderla en las zonas urbanas. Los mismos negocios de comida de la zona se quejan con las autoridades para que los quiten de la calle, ya que les espantan los clientes. Ante la pregunta de cómo pensaba que irían las elecciones, el comentario era demoledor y, con nostalgia afirmaba que seguro los republicanos recuperarán el control de las cámaras.

En el caso del taxista estadounidense, su plática versó sobre lo mal de la situación económica; hombre ya retirado, pero con la necesidad de trabajar, comentaba que él había tenido que vender su casa antes de perderla por la crisis de las hipotecas, pero que le fue muy mal ya que su propiedad valía 500 mil dólares y la había tenido que vender por la mitad. Me comentó casos de otros amigos suyos y de ejemplos de su zona de residencia, vivía en donde las propiedades habían sido abandonadas y, en el peor de los casos, nunca habían sido habitadas nuevamente.

Mientras platicábamos, por la calle se podían ver cosas extremas, por una parte se seguían viendo pequeñas construcciones de zonas habitacionales pero, por otra, efectivamente, me encontré con oficinas de venta de inmuebles no solamente cerradas, sino que con muestra de estar totalmente abandonadas de meses atrás. Ante la pregunta de cómo creía que irían las elecciones, él clamaba por que regresaran los republicanos, ya que antes no pasaba lo que estaban viviendo.

Y, efectivamente, ayer, al cierre de las votaciones, los resultados marcan un revés a los demócratas, un voto de castigo a Obama y su política, algunos dicen de cambio. Yo creo que la expresión correcta sería: la gente apostó por alejarse del status quo y, ahora en la desesperación, quiere regresar a él, quiere regresar a las viejas recetas. Los estadounidenses no habían sentido en carne propia una crisis tan difícil; la de los treinta, es solamente una referencia histórica, no un recuerdo vivo.

El estadounidense ha votado por desesperación y, en el fondo, no importándole que se regrese a las viejas prácticas autoritarias que le han dado grandeza y orgullo a la Unión Americana frente al mundo; ha votado para mitigar su angustia y tener la esperanza de recuperar su capacidad de compra y su empleo, aunque esto sea a costa de una nueva guerra, o de enviar tropas a invadir otros países.

Otra reflexión que cabe hacer ante esta situación es que, al igual que en México y otros países, estamos viendo lo que los sistemas democráticos están generando cuando se da la alternancia, los partidos que pierden el poder hacen hasta lo imposible por no dejar gobernar al que ganó y le apuestan a sus fallos para regresar al control de la política. Este efecto se está repitiendo en la mayoría de las democracias en diferentes países. ¿Qué será lo que está fallando? ¿El sistema político, los políticos como tales, el sistema financiero mundial, o el hombre?

Estamos en un momento crucial para la humanidad y va a ser necesario que revisemos todos los sistemas que nos han hecho llegar a esta situación mundial. De ahí la importancia, las confluencias y expectativas que se están generando para el 2012.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Tendencias

¿Hacia dónde van las tendencias de las RP y de la Comunicación? Una pregunta que siempre se harán los profesionales de estas disciplinas con el objeto de estar siempre preparados. También es importante tratar de saberlo con el fin de medir la temperatura de los ambientes externos que puedan afectar a los negocios u organizaciones.

Durante los años sesenta, las tendencias de la profesión estuvieron marcadas por el boom de la comunicación ante el desarrollo de los medios electrónicos e insertas en un mercado dominado por los monopolios; la poca competencia, y los sistemas políticos únicos. El publirrelacionista no era más que un facilitador de relaciones entre los grupos de poder, políticos y grandes empresarios.

A lo largo de los años posteriores, con el desarrollo de las carreras universitarias de comunicación, orientadas a crear profesionales para trabajar en los medios; el inicio del mercado abierto, y la entrada de la competencia de mercados, las relaciones públicas empiezan a configurar su camino enfocándose más hacia la institucionalidad, el mercado y a absorber la expansión de los medios de comunicación.

Más tarde, la globalización, junto con la explosión de las tecnologías de la información, le imprime un dinamismo inaudito a la profesión, la cual se enfrenta a los retos de una mundialización inmediata, tanto en medios de comunicación, como en el enfrentamiento a individuos, ciudadanos o consumidores más informados. Esto hace que la profesión expanda su visión y campo de trabajo y que rebase sus fronteras al iniciar el manejo diario de variables globales y asimilar la velocidad de la información. A partir de este momento, las relaciones públicas ya no tienen tiempos ni horarios fijos: el reloj global es una constante.

Ahora, los acontecimientos terroristas de inicio del siglo han marcado y caractrerzado una tendencia: la globalización del riesgo mundial. Éste, en conjunto con la digitalización, nos señalan la directriz sobre la cual, durante los próximos años, se moverá la profesión.

Lo anterior implica que, hoy, los factores que están moviendo a la sociedad, los negocios y la política, son la inseguridad, el terrorismo, el crecimiento del narcotráfico, el riesgo financiero, crisis económicas y, por supuesto, los riesgos ambientales. Empresas, individuos y sociedad en general se estarán enfrentando con estos temas por lo menos en la primera parte de este siglo.

Para nuestra profesión, esto implica, en conjunto con el crecimiento de las redes sociales, una mayor demanda de respuestas claras por parte de las organizaciones y de la sociedad. Los temas de sustentabilidad, transparencia, apoyos sociales, respuestas inmediatas y el manejo de crisis permanentes, serán los drivers de nuestra profesión para el futuro inmediato.

jueves, 28 de octubre de 2010

Las opciones de México

México se va perfilando hacia un destino que es incierto, la fecha será 2012, año en el que se tendrán las elecciones, anunciadas ya desde ahora, como las más decisivas e importantes para nuestra democracia. Ya empezamos a ver cuáles serán las posibles opciones en este juego de poder.

Por el PRI, hay dos jugadores principales: el conocido y ampliamente anunciado Peña Nieto y el nuevo, ya en franca carrera electoral, Manlio Fabio Beltrones; el primero representa a las nuevas corrientes del PRI, el segundo a las corrientes tradicionales del partido. Peña Nieto es gobernador en funciones, la ventaja es que tiene el recurso y la posición para exhibirse y dar resultados, la desventaja es que en un ejercicio del poder siempre se corren riesgos y puede haber asuntos que le pueden explotar en la cara y ser usados por sus enemigos.

Beltrones, en cambio, goza de ciertas ventajas que son cómodas en esta carrera; por una parte la prerrogativa de ser Senador, lo que implica tener información privilegiada y no tener el riesgo de una administración con fallas. Su posición anterior fue la de Diputado y su puesto de Subsecretario de Gobernación está ya muy lejos, a los ojos del elector, y sus resultados como gobernador, aún más. Lo que se debate en este partido es una mentalidad del nuevo PRI, contra una corriente más tradicional que incluye a todos los dinosaurios.

Por parte del PRD tenemos al eterno AMLO, que ya por el desgaste es el candidato que sirve de golpeador al sistema, pareciera que su función es ir a desgastar al candidato puntero, sin importar si gana o no. Las desventajas de AMLO son que polariza, enfrenta, además de no tener puesto político, por lo que todos sus apoyos económicos para hacer campaña, sembrarán duda y la edad no le ayuda ya mucho con los nuevos votantes.

El candidato del partido amarillo con más posibilidades es Marcelo Ebrard, que está haciendo una buena administración en la Ciudad de México y tiene una imagen más joven. Claro, tiene sus riesgos, un pasado priista, relaciones con los más cuestionados en la política, Carlos Salinas y Manuel Camacho. Una gran duda en este partido es qué van a hacer con la figura de Juan Ramón de la Fuente: si lo mandan al Estado de México, al DF o lo guardan para la grande, si es que llegaran a eliminar a Marcelo.

El que parece estar al momento en una seria desventaja y puede llegar un poco tarde es el PAN, no se ve ningún candidato que lleve la delantera, se piensa que podría ser Lujambio, y más ahora que fue a mostrar sus dotes de sapiencia política al Foro en España, en donde fue directamente a enfrentar a Ebrard y Salinas en un panel sobre México, y que por una parte, el primero no se presentó y al segundo lo mandaron a pasear por la ciudad ya que la política mexicana estaba por descarrilar el famoso Foro. También está Josefina Vázquez Mota y el otro eterno candidato, Santiago Creel, que si hiciéramos el paralelismo con el PRD, estaría jugando el mismo papel de su enemigo político AMLO, que además le ganó en la elección del DF hace algunos años. Salvo que salga algún otro candidato y/o las presiones de la ultra derecha empujen a alguien más, por el momento no se ve visible alguna otra candidatura panista.

Al día de hoy, finales del 2010, estos son las opciones para México. Ahora bien, ¿cuáles son los retos que tienen estos candidatos? Primero, unir al país, el encono que se ha generado desde la alternancia ha generado que no se dejen gobernar y que estén jugando con las variables de la gobernabilidad, de las políticas públicas y con el control de los monopolios públicos y privados. Como resultado, tenemos que ha aumentado la inseguridad, se ha deteriorado la imagen del país y no se han tomado las grandes decisiones necesarias para generar una mayor competitividad y tener una mejor posición en el escenario mundial para salir adelante.

Por la parte política, se sigue jugando al control de los pobres como botín electoral, a la dependencia económica de la acción de los gobiernos locales y al control de la democracia. Estos factores han generado un aumento en la corrupción, de la inseguridad y estancamiento de la certidumbre jurídica en los ciudadanos y las empresas, además generan incertidumbre para los millones de pobres y de jóvenes que no encuentran en sus sueños un futuro de ninguna manera.

El juego del poder avienta licitaciones públicas, modernización de los medios, leyes para poner al día la actividad económica y, todo esto, frente a los ojos complacientes de los partidos políticos, los ciudadanos y los medios de comunicación.

El resultado, hoy, es un México deteriorado, sin visión de un futuro, ni caminos de conciliación. Esas opciones, estos hombres y mujeres que hoy tenemos como candidatos para gobernarnos en el futuro, tienen que enfrentar todos estos problemas. ¿Realmente tendrán soluciones y propuestas o solamente se entregarán al juego de la componenda del poder? Por el bien de México, ojalá tengan una visión de Estado.

Nota final: La transparencia en manos del PAN está totalmente reprobada. Se ha deteriorado enormemente en estos últimos 10 años, no caben más comentarios.

miércoles, 27 de octubre de 2010

México

Días atrás se desató una polémica entre empresarios del rubro turístico y el gobierno mexicano ante sí es conveniente utilizar, todavía, la marca México o alejarse de ella para promover los distintos destinos en el extranjero. Un pleito inverosímil y estéril porque existen variedad de formas para resolver el asunto sin entrar en esa polémica.

Lo triste del asunto es que la autoridad federal, que anteriormente tenía muy buenos planes de hacer una comunicación bajo estándares mundiales y con profesionales en la materia hoy, no lo ha hecho. La campaña que supuestamente iba a implementar entre varias Secretarías de Estado, entre ellas Relaciones Exteriores, ProMéxico y Turismo, no existe.

Lo peor del asunto es que los empresarios turísticos mantienen la misma actitud de siempre, prefieren renunciar a la marca México, en lugar de apoyar y juntarse para que enfrentar el problema entre todos. Como siempre el camino fácil: que el gobierno pague y se encargue.

Recuerdo hace algún tiempo, durante un diplomado de mercadotecnia para empresarios hoteleros en un estado de la república, que ellos tenían la misma actitud. "Que el gobierno nos resuelva el problema de la promoción", decían. Ya cansado de ver esa actitud, les hice unas preguntas simples ¿Quién es dueño del estado, ustedes o los funcionarios temporales del gobierno?, ¿Quién es dueño de sus hoteles y por ende de sus negocios?, ¿Quién debe de promover sus negocios y su estado? Nadie me pudo contestar y a partir de ese momento en el diplomado ya no volví a escuchar la frase de que el gobierno debería de hacerse cargo de la promoción del estado. No aplicaría de igual manera en este caso.

Es cierto que el gobierno debería de hacer algo, pero si desafortunadamente apenas pueden controlar la imagen y la comunicación aquí dentro del país, difícilmente podrán hacer algo mayor con la imagen en el exterior. Pero si todos los empresarios turísticos, profesionales de las relaciones públicas y medios de comunicación nos juntáramos para revisar el problema y dar soluciones, estoy seguro que por el bien del país, su imagen y los impactos económicos que esto tendría, seguro encontraríamos una muy buena solución.

Ya nos estamos dando cuenta del juego perverso de los grupos de poder y algunos medios de comunicación, que sólo hablan de muertos, ya están empezando a dañar terriblemente la imagen de México. Es necesario aclarar que en realidad tiene menos muertos y menores índices delincuenciales al año que Brasil, que es el país que en estos momentos obtiene las mayores inversiones extranjeras en América.

jueves, 21 de octubre de 2010

La lección de los mercados emergentes

La semana pasada, se llevó a cabo la reunión anual del Foro de Mercados Emergentes en la ciudad de Washington, USA, por lo que, tuve el gusto de observar la participación de ex ministros de Canadá, Alemania, Bangladesh, así como a directores y ex directores de Bancos Centrales de Asia, África y América.

Como todos los años, siempre brilló la presencia de Michel Camdessus y de Enrique Iglesias, además de muchas otras personalidades del mundo financiero internacional.

En esta reunión se revisó el impacto de la crisis en los mercados emergentes, llegándose a la conclusión de que los países avanzados tuvieron más dificultades para controlar la crisis financiera, mientras que los países de los mercados emergentes absorbieron de mejor manera sus efectos y han tenido una superior recuperación a la fecha.

La gran diferencia está en que los países emergentes en los últimos años y con el fin de mejorar sus condiciones económicas, han reformando sus instituciones, definiendo mejores políticas públicas y, para enfrentar la crisis, basaron sus estrategias en el desarrollo del mercado doméstico.

Ahora bien, también queda manifiesto que esta capacidad de respuesta puede no ser suficiente para enfrentar los nuevos retos globales, por lo que podrían tener una débil reacción a las presiones y demandas externas, las cuales pueden generar deterioros en los mercados internos por la influencia de la guerra de tipos de cambio, la inflación, las fluctuaciones de los capitales y el aumento de la liquidez a nivel mundial. Por su parte, se concluye que los países avanzados tampoco han podido reaccionar adecuadamente a sus compromisos industriales, esto debido al ego superlativo de sus propias economías.

En el contexto de la crisis mundial, los mercados emergentes están dando una gran lección, primero al no ser parte del problema, y ahora más bien, ser parte de la solución, en la que se incluye a los países del continente africano.

Por su parte, los países asiáticos han aprendido mejor de las prácticas para salir de la crisis, primero han sabido tomar las medidas adecuadas y, en segundo lugar, han dado pasos para aprovechar la crisis como plataforma de lanzamiento, aumentando su competitividad; mientras tanto los países de Latinoamérica han cambiado el pragmatismo de las decisiones ante cierta estabilidad para mantener y cuidar las políticas locales, además de que las decisiones se toman por ideología momentánea, sin visión de largo plazo y careciendo de políticas de Estado. Desafortunadamente, en la región seguimos jugando al mercado del monopolio y del proteccionismo, lo que nos aleja de la ruta del crecimiento. Brasil y los países asiáticos han tomado las decisiones adecuadas.

En una investigación preparada por el Foro de Mercados Emergentes con una visión al año 2040, llamada “Rompiendo con la complacencia: una agenda para el resurgimiento”, se presentan los nuevos retos para la región: primero, reducir las disparidades en las oportunidades de la población, segundo, aumentar la productividad y, tercero, aumentar la competitividad.

Uno de los factores más importantes que enfrentarán los países de la región es algo que los investigadores han llamado la trampa de los ingresos medios, en donde los sistemas y políticas macro tomadas por los países para crecimiento económico, han logrado que la actividad primaria suba los ingresos de una gran masa de población, pero al mismo tiempo generando una baja competencia en mercados desarrollados debida a bajos ingresos, bajas exportaciones y poca innovación tecnológica.

Otro gran freno que se debe de considerar, y en México es uno de los grandes casos, es que el fenómeno de la informalidad tiene un gran efecto devastador en las economías, ya que además de no obtener impuestos por esta actividad, la población dedicada a este tipo de economía no adopta nueva tecnología, evita la educación, no usa la innovación y no ayuda a aumentar la competitividad ni la productividad, independientemente de que esta actividad está fuera de la ley y propicia los esquemas de corrupción entre la sociedad y las autoridades. Si a esto aumentamos que el problema de la inseguridad y guerra contra el narcotráfico nublan la visión de Estado, los retos para nuestra región son muy grandes.

Las conclusiones del Foro y del estudio son muy claras para todos los países emergentes: lograr una sociedad más inclusiva, mejorar considerablemente la productividad y fomentar una mayor competencia, la cooperación regional y la apertura.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Entre las RP y lo legal

Hace poco tiempo, al conocer mi profesión, una persona me preguntó que cuál es la frontera entre las Relaciones Públicas y los asuntos legales. La pregunta es interesante, y he aquí mi respuesta.

Los publirrelacionistas deben conocer el marco legal del país; del sector, y hasta de la categoría del producto o servicio de la organización en cuestión. Se debe estar al corriente de los códigos legales que aplican y, dentro del diagnóstico que, previamente, se realiza, determinar si existen riesgos y vulnerabilidades legales.

Con base en mi experiencia con diferentes industrias y categorías de producto, los temas legales salen a relucir cuando existen situaciones de crisis. En ese momento, el publirrelacionista debe sentarse con el abogado de la empresa o con los asesores legales externos para entender las leyes; saber cómo interpretarlas, y hablar de ellas de manera fácil y sencilla.

Las leyes son complicadas; y el mayor problema es que se encuentran sujetas a diferentes interpretaciones. En nuestros tiempos, un asunto constante es que se litigue en los medios de comunicación. Como en todo proceso de crisis, puede llegar el momento en que el coordinador central del manejo y administración de la crisis sea el publirrelacionista. Esto habre la posibilidad que también se tengan que administrar los asuntos legales; por eso, el profesional de las RP necesita entender los principios básicos de las diferentes legislaciones.

No debemos de tener miedo, no es necesario ser especialista, pero sí tener los conocimientos básicos y, sobre todo, leer las leyes. Aunque no lo crean, hace poco en el manejo de una crisis, antes de subirme a un avión, uno de los abogados de la empresa me remitió a mi correo un documento legal para un procedimiento administrativo y los argumentos legales que lo acompañaban. En ellos vi una serie de riesgos si ese documento llegara a hacerse público por la forma en que estaba redactado y dado que faltaban algunos argumentos legales.

Durante todo el vuelo, después de revisar los procedimientos y las leyes involucradas, no me quedó otra más que volver a redactar dicho documento, bajo la lógica de darle un orden y una secuencia que abarcara todos los hechos y respetando todos los derechos de los involucrados, esto simple y sencillamente con base en la reglas y leyes vigentes. Al llegar al aeropuerto lo regrese vía mail como una recomendación, que los abogados revisaron y entendieron las dimensiones y los riesgos que se podrían evitar, le hicieron las adecuaciones para reforzar los aspectos legales y el documento salió sin crear ningún problema.

Técnicamente, no hay un límite para ambas profesiones que, simple y sencillamente, se complementan en determinadas situaciones. Para lo que no hay cabida, es para el típico comentario "no entiendo nada de leyes, es muy complicado", en esta profesión hay que aprender de todo, a veces hasta de química industrial o de efectos de vacunas.

jueves, 14 de octubre de 2010

La economía mundial

El mundo sigue su camino para enfrentar el famosísimo año 2012. Supongo que por cuestiones cíclicas, magnetismo, ley de probabilidad, coincidencia y por la fuerza de voluntad de la mente de muchas personas, pareciera que están confluyendo decisiones, actos, elecciones y una infinidad de situaciones que perfilan ese año como decisivo para la humanidad.

Dicho año no será como lo fue el 2000 por el supuesto y famoso colapso de las computadoras; en aquella ocasión el mundo iba a tener un gran problema (en retrospectiva, podemos pensar que algunas otras cosas en la historia de la humanidad, y según la teoría de la conspiración, fueron creadas con fines comerciales o políticos). En el caso del 2012, la fecha fatídica, está anunciada y desde culturas ancestrales, en donde se ve principalmente a los mayas.

Lo malo es que ahora el escenario económico mundial nos genera una antesala con no buenos augurios; seguimos pagando el resultado de la crisis mundial del 2008 y, si vemos hacia el futuro, la situación no es nada halagüeña. De hecho, al término de la reunión del Fondo Monetario Internacional, sus resultados son inciertos y los podríamos resumir en incertidumbre, falta de confianza, exceso de reservas en algunos bancos centrales y se está desatando una guerra del tipo de cambio a nivel mundial.

Algunos futurólogos como Mattias Chang, hablan de una segunda ola del tsunami financiero que puede reventar a finales del 2010. Si tomamos en cuenta lo deprimido del mercado interno de los Estados Unidos y el riesgo de que en las elecciones de este país en noviembre, los republicanos vuelvan a tener control del congreso, podemos esperar cualquier cosa, este partido siempre ha resuelto las cosas con guerras, ya sean comerciales o de las que cuestan muchas vidas.

Lo que es innegable es que el sistema financiero mundial ya no sirve como tal y es urgente que se diseñen nuevas instituciones para enfrentar el futuro de la economía global. El problema es que el sistema actual, el cual ya demostró que está rebasado, fue creado como una consecuencia de la segunda guerra mundial, por lo que habría que pensar si la actual situación económica se considera tan grave como para que exista la voluntad política en todos los países de crear uno nuevo. ¿O es que el mundo necesita una nueva conflagración mundial, con el fin de romper todos los sistemas actuales, tanto económicos, como de producción, energéticos y de tecnología?


Ojalá no sea así y el mundo encuentre los suficientes incentivos en un entorno de paz para concertar un nuevo sistema financiero, ojalá que sean incentivos positivos. Lo que sí queda muy claro es que es tiempo de actuar, es tiempo de definir qué tipo de instituciones se necesitan y, el mayor reto en mi opinión, es el hecho de, primero, romper el estatus quo de la economía creada en los últimos cuarenta años, segundo, que el diseño institucional no se vea solamente con ojos de resolver la situación actual y con una visión de corto plazo, sino que sea para enfrentar una nueva alineación mundial y, finalmente, el mayor reto será definir qué tipo de economía vamos a tener en los próximos cuarenta años.

Hoy estamos viendo grandes y claras tendencias en donde se debe de privilegiar a los emprendedores, a la creación de las pequeñas y medianas empresas, pero poco se está haciendo para cambiar el diseño de las instituciones que actualmente fomentan y apoyan el desarrollo de las industrias. Todas están creadas bajo la base de apoyar a las grandes empresas, bancos, aseguradoras, sistemas de pagos y financiamiento, las reglas de instalación, todo está hecho para fomentar empresas de corte grande, global y de alto riesgo.

Es importante que en este diseño del nuevo sistema financiero mundial, pensemos también crear las reglas que faciliten a los entrepreneurs la creación de negocios que fomenten el empleo y una actividad económica en todas las regiones del orbe, para tener asegurada la generación de bienes y servicios desde cada comunidad y crear una red que, poco a poco, alimente al mundo y genere empleos para toda la población mundial.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Institucionalidad

La institucionalidad son aquellas series de reglas y políticas que toda organización tiene para defenderse del mundo externo. Pero, al mismo tiempo, está compuesta por los usos, costumbres y mitos que se construyen con la experiencia diaria.

Esta práctica convierte a la institucionalidad en un monstruo que está vivo y se alimenta de lo que los diferentes departamentos y funcionarios creen o entienden de las reglas internas. Ellos, por el hecho de leer los periódicos, ver las noticias o creer entender el comportamiento del resto de sus demás compañeros, quieren aportar o emitir su opinión en situaciones críticas en nombre de la institucionalidad; situación que puede afectar gravemente los escenarios de actuación. Por eso, en caso de una crisis, lo que se cuida más es lo que puede suceder dentro de la organización.

Me han preguntado ante diferentes situaciones de crisis, cual es la regla básica para resolver el problema. Simple y sencillamente les contesto que con la institucionalidad. Es decir, todas aquellas reglas y fundamentos que hicieron nacer a la organización y que la han llevado hasta dónde se encuentra actualmente.

De hecho cuando se logra controlar cualquier situación, desde la más pequeña hasta la más compleja, lo único que puede dar certeza de que todo está en orden, es cuando la institucionalidad representa nuevamente orgullo y certeza del futuro. De hecho, ahí es en dónde radica, después de una situación de crisis, la oportunidad de dar pasos hacia adelante para subir los escalones de un mejor futuro, con base en el orgullo de lo que es la organización, sus fundamentos y la satisfacción del trabajo.

En ese momento es de vital importancia que con hechos, apoyados con las reglas de la organización, retomar y corregir en la práctica lo que de alguna manera se había venido perdiendo, y que en la crisis se pudo alterar. Se trata de que la empresa entre en una nueva dinámica de comunicación de acuerdo con los lineamientos internos, lo cual ayudaría a dar un salto cuántico a un nuevo esquema, más eficiente y que renueve la imagen en esa nueva etapa.

La institucionalidad también, está conformada por todas las percepciones y pasión de la gente que trabaja dentro de una empresa y que después de una situación de crisis, cuando la gente vuelve a sentirse orgullosa de su institucionalidad, podrá volver con toda calma a tener la confianza de trabajar para nuevas épocas.

jueves, 7 de octubre de 2010

El dilema de la alternancia

El presidente Calderón abrió el proceso de sucesión presidencial para 2012, portó el traje de campaña y se lanzó oficialmente, con la espada del poder, para defender la permanencia de su partido en la Presidencia de México.

En entrevistas de radio, en discursos en actos internacionales, retoma el discurso y el tono de su campaña, que por cierto hacía tiempo que no le veíamos. En mi humilde opinión, este tipo de comunicación política y gubernamental mucho le hubiera servido para consolidar su imagen como presidente; pero, sentado en la silla de los Pinos, olvidó.

Ya empieza a hablar de la posibilidad de que el PRI regrese a Los Pinos, pero afirmando que va a hacer todo lo posible para que esto no suceda y, al mismo tiempo, ataca frontalmente a AMLO como no lo había hecho en todo su periodo presidencial, repitiendo que es un peligro para México. Y con esto, entrando de lleno al juego político-electoral.

Se abre en paralelo un dilema para la alternancia en México, donde la única ventaja de ésta es que se ha podido mantener el rumbo macroeconómico, pero que, en lo que corresponde al mercado interno, no se ha consolidado un diálogo constructivo para que el país avance.

La primera respuesta a la alternancia en 2000 por parte del sistema político mexicano, fue que los poderes que perdieron la Presidencia se instalaron en el Congreso y trataron de gobernar desde ahí, generando una parálisis legislativa. Posteriormente, en el siguiente periodo que inicia en 2006, se empieza a ganar fuerza en las gubernaturas y se completa el cerco a la Presidencia. De este fenómeno nace, en parte y con gran fuerza, el sentimiento que hasta ahora predomina en la población, y que ha sido expresado por el ex presidente Fox y hasta por el mismo presidente Calderón: hay una gran posibilidad de que el PRI regrese al poder. Habrá que sumarle el otro fenómeno, que es la precandidatura de Peña Nieto.

Con este panorama, México estará enfrentando el dilema de la alternancia y la gran duda es si como país y como sistema político podremos absorber, que para 2012, pueda el PRI instalarse en la Presidencia de la República. Y ahí en donde este fenómeno genera la gran duda, surgen mayores interrogantes: ¿qué pasaría?, ¿regresaría el viejo PRI y sus prácticas ancestrales?, ¿qué pasa con el control del gobierno, cambiarán todos los funcionarios, se va a paralizar la burocracia?, ¿cuánto tiempo tardará el nuevo gobierno en tomar el control?, ¿se bajará la guerra al terreno del pleito burocrático por el control de plazas y presupuestos?

Y qué decir de los balances de la política; si la gente vota por el PRI, ¿dará ahora el balance tradicional al PAN en las cámaras o, como reacción de castigo a los excesos del PAN, se dará la mayoría absoluta al PRI en el Legislativo?

Este dilema vuelve a poner en jaque a México durante los próximos dos años; espero que pronto se dé un arreglo en donde se pongan las reglas del juego de la elección, en beneficio de todos y para evitar pleitos innecesarios en la contienda que puedan dañar al país; que después de esto, podamos ver un arreglo institucional que defina los diferentes escenarios para si gana el PAN o si gana el PRI.

México va a enfrentar una nueva prueba democrática, la de la alternancia real, en donde dos partidos (perdón al PRD, pero está totalmente borrado del mapa por sus inconsistencias, pleitos de barrio y escaramuzas de callejón) pueden estar disputando cada seis años la Presidencia de la República, y eso para nuestra democracia es sano, pero es necesario que los políticos se olviden de los arrebatos políticos, los caprichos y sentirse dueños del país.

Los dos ejes extra para los que es imperativo que se determinen reglas básicas de funcionamiento, son los funcionarios de carrera y el plan estratégico del país a largo plazo. Esto con el fin de que México no cambie de rumbo cada seis años por visiones partidistas y que los funcionarios trabajen para México, no para los partidos.

miércoles, 6 de octubre de 2010

Crisis en control

Las crisis explotan cuando uno menos se las imagina. En el momento que ocurren, para los profesionales de la comunicación, el primer gran problema es lograr que los ejecutivos en la empresa, acepten, primero que es tal, y ya establecida, el segundo reto es tomar las decisiones con dos grandes objetivos: tener el control y que estas decisiones, por más urgentes o difíciles que sean, no afecten el futuro de la compañía. Esto es a lo que se denomina tomar el control de un gran problema, y de arranque es lo más complejo.

A partir de ese momento, la combinación de información, acciones, ejecución y tiempo, serán cruciales para mantener el control de las variables internas y externas. Esto permitirá cambiar el estatus de negativo a neutral y de ahí, a uno positivo, lo que significaría que la situación regresa a "la normalidad", como se refieren todos los grandes gurús del manejo de crisis; pero es importante, ya manejada la situación, descubrir que estamos en un nuevo nivel de normalidad.

Por lo general se habla poco de que ocurre después de las crisis y se habla mucho de aprovechar los beneficios que ofrece. Sin embargo, he visto casos que éstos no se generan, primero, porque los ejecutivos quedan tan exhaustos, que lo único que desean es retornar a su antigua zona de confort. Pero en realidad, pocos entienden de que esa normalidad está en un escenario totalmente nuevo, y que para reaccionar se debe de tomar todo esto en cuenta.

Bajo este principio los clientes ven a la empresa con una nueva óptica y todos los involucrados, entenderán que se encuentran en un diferente escenario de la compañía y eso es lo que se convierte en una buena plataforma.

El reto de esta etapa, cuando una crisis es bien manejada y se resuelve por haber tomado las decisiones correctas y que no se habían hecho con anterioridad, es no regresar a lo mismo de antes. Es muy importante mantener lo que se logró en muy corto tiempo y con decisiones difíciles, porque la normalidad ya no regresa.

Un buen manejo de crisis, en el fondo, se basa en tomar el control de las variables, el buen juicio en las decisiones, la correcta visión del futuro y finalmente, el entendimiento que la vieja normalidad no regresará jamás.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Política fallida

En los últimos meses ha existido un gran dilema sobre si México, el Estado o el gobierno, son fallidos; considero que la polémica seguirá por mucho tiempo. Lo que sí se puede declarar fallida, es la política en México.

Aristóteles definió la política como “el arte de lo posible”, pero también entendía la política como la “búsqueda del bien común”. Tomando en cuenta este principio, en México nuestros políticos no hacen ni la una, ni la otra, por lo tanto los podemos declarar fallidos.

Hoy, en nuestro país la política “debería de hacer posible que hubiera acuerdos logrando con ello las reformas que le darían certidumbre a nuestra economía”; no es posible porque nadie se pone de acuerdo, los políticos no tienen voluntad para hacerlo, están fallando.

La política debería “estar haciendo posible que los partidos políticos se pusieran de acuerdo en políticas públicas para desarrollar un nuevo modelo político, con visión de Estado para asegurar el crecimiento democrático del país”; la política no ha podido lograr más que desacuerdos, divisiones profundas entre grupos y partidos, y polarización.

La política debería “estar haciendo posible el diálogo entre los diferentes grupos políticos para luchar, en conjunto, contra la inseguridad, definir leyes que protejan a la sociedad civil”; los políticos sólo ven para sus propios intereses.

Se debería de “estar haciendo posible que la misma política tuviera el respeto y reconocimiento de toda la población, por el hecho de ser el arte de lo posible”; hoy, ya ser político no tiene ninguna seguridad, a tal grado que, sin ningún respeto, empiezan a asesinar políticos.

También ese arte de hacer lo posible debería “estar logrando una adecuada participación y comunicación de y con la ciudadanía”; desafortunadamente, cada día está más lejos de la ficción de cualquier grupo social.

Bueno, el colmo más grande es ver que, cómo antítesis de ella misma, la política no puede ni siquiera hacer posible el entendimiento de los mismos integrantes de los partidos políticos. Hoy, los políticos que no logran la candidatura de su partido, son capaces de brincar sin ningún descaro de un partido a otro.

El otro de los colmos, que reafirma ésta situación fallida de la política en México, es el simple hecho de que se dan alianzas que parecieran ser imposibles, se podría pensar que, al contrario, esto es parte de ese logro de la política de hacer posible lo imposible, pero en este caso, eso imposible que en México sí se dio, hoy representa la incongruencia y el problema político más grande que haya existido; contra el tiempo, quedará demostrado.

Un ejemplo más de la política fallida en nuestro país, es el hecho de que hoy vemos una hondonada de expulsiones y, valga el silogismo, de no expulsiones, en los diferentes partidos políticos. En el PAN expulsan a Espino, ex dirigente de ese partido y que seguramente se refugiará en algún otro con diferente ideología, pero no expulsan al ex presidente Fox por sus últimas declaraciones. Por otra parte, a AMLO no lo han querido ni tocar, cuando él opera flagrante y abiertamente en otro partido, rompiendo todas las reglas habidas.

Muchos ejemplos tenemos todos los días, sólo basta leer la prensa nacional y ver que, hoy, los políticos mexicanos son el animal político más fallido de la tierra.

Lo malo es que si siguiéramos la lógica de que unos son de la generación perdida y de la famosa generación del NO, los políticos jóvenes no estarían haciendo esas cosas pero, desafortunadamente, vemos a diario también que son pocos de la nueva generación que no están contaminados por este efecto fallido de la política nacional.

Y ahora, con motivo del Bicentenario y los valores que queremos rescatar de nuestra historia y con los anuncios y promociones de que vamos a hacer los valores de nuestros héroes, desafortunadamente nos damos cuenta de que poco podemos hacer los ciudadanos, ya que nuestros políticos sólo saben tomar las cosas malas, como son las traiciones y la búsqueda de los intereses personales, contra los valores verdaderos de buscar el bien de común.

Por esto, sí podemos declarar fallida la política en México.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Ética en Relaciones Públicas

Revisando el tema de la ética en las Relaciones Públicas, es importante entender que la nueva revolución en los medios digitales, ha generado un nuevo balance en los asuntos de éste tema en la sociedad y en nuestra profesión.

Hace diez años, cuando el trabajo de las relaciones públicas estaba concentrado exclusivamente entre los practicantes y los medios, el asunto de la ética se encontraba más dirigido a cuidar que fuera hecho por profesionales y expertos. Asimismo, por cuidar que la información proporcionada a los medios fuera cierta y que no se generarán acuerdos económicos fuera de lo "honorable".

A partir de que la sociedad y el consumidor han creado sus propias redes sociales para generar sus contenidos y "son más dueños" de parte de la información, la balanza de los cuidados de la ética se han transportado a otras acciones de la práctica de las relaciones públicas. El foco ya no es la relación con los medios, ahora está volcado directamente a las acciones de responsabilidad social de las empresas. Hoy, se cuida que las acciones que se hagan por parte de las compañías y que están dirigidas directamente a los consumidores, sean verdaderas y no solo sea un gancho para generar más consumo.

Ciertamente en esta época y con el poder de las redes sociales, este tipo de situaciones es más difícil que la gente no se de cuenta, o que en caso de suceder, sean denunciadas públicamente. Pero al mismo tiempo, entramos en tiempos en dónde los publirrelacionistas deberemos de tener más cuidado; los profesionistas de las relaciones, tenemos códigos de conducta y asociaciones que vigilamos la integridad de la profesión y del gremio, pero al haberse trasladado esa responsabilidad, ¿Quién cuida ese sector?

Ya empezamos a ver casos en Twitter. Por ejemplo, que se lanza información que después no es cierta, o rumores que hacen mucho daño a las compañías por comentarios fáciles de gente que no mide lo que sus palabras pueden causar.

Finalmente, esto nos lleva a entender que debemos de luchar por mantener la ética en las acciones de comunicación de las empresas, así como en los practicantes de nuestra profesión. Pero al mismo tiempo, buscar que estos conceptos lleguen a la sociedad en general, solo queda regresar a los valores básicos del buen comportamiento humano, que en un México con la delincuencia a nuestro alrededor, no debemos ceder a la tentación de hacer la tarea por el camino fácil.

Ahora más que nunca debemos de cuidar nuestra ética personal, de la profesión, del negocio.

jueves, 23 de septiembre de 2010

México du solei

Observando las festividades del Bicentenario.- Cuando presentaron a los acróbatas escribiendo con sus cuerpos la palabra México, me vinieron a la mente dos cosas: ¿dónde habían quedado los voladores de Papantla? Y, por el enfoque que le quiso dar el PAN a las ceremonias, habían convertido a México en un Cirque du Solei. Las festividades parecieron una ceremonia de inauguración de olimpiadas.

Las quejas sobre la festividad son amplias; para mí la más grave es el hecho de querer renunciar a nuestras raíces y pasado, quisieron pintar a un México diferente, estilizando los valores y las costumbres, dirigiéndolo hacia un público joven (¿acaso con visión electoral?) y alejándose hasta lo más posible de todo lo vernáculo, nacionalista, y revolucionario (que al PRI le ha funcionado muy bien). Por elitismo natural, dejaron en el desván a la historia, las costumbres y la música; la visión, netamente, fue de ceremonia televisiva.

México se convirtió en un circo, no sólo por tomar la filosofía del Cirque du Solei, que es “hacer un montaje dramático, y un esparcimiento callejero” —en este caso de la historia de México—, sino, además, por tratar de “invocar a la imaginación, incitar a los sentidos y evocar las emociones de la gente” cosa que, en mi opinión personal, no se logró del todo. El verdadero problema fue el riesgo con el que se llegó a estos festejos, un saldo de verdadera preocupación; en 30 municipios se cancelaron festividades cívicas por motivo de la inseguridad, había 115 municipios inundados, en las dos últimas semanas cayeron dos cabezas importantes del narco, lo que podía implicar, falso o cierto, venganzas de la delincuencia en las festividades, de ahí el gran montaje, real o cierto, de los 300 francotiradores y la extremas seguridad para las ceremonias.

Otros factores que influyeron al agravamiento de la situación, fue el anuncio de los secuestradores del jefe Diego recordando que la negociación sigue estancada, los llamados a que la gente no asistiera, los mensajes de la alta seguridad que se iba a imponer, el cuidado de las festividades por parte de policías, marinos, Ejército y demás corporaciones, todo lo cual pegó directamente en el ánimo de la gente que, en su gran mayoría, prefirió no arriesgarse ni a salir de su casa.

Ya en plena celebración, vimos a ex presidentes en Palacio Nacional, Fox escuchó el Grito y se fue, mientras que Carlos Salinas departió felizmente con algunos invitados; al día siguiente, escuchamos, los llamados públicos al diálogo del PRI y la aceptación tácita, por parte del presidente. Posteriormente, el desfile, con participación de contingentes internacionales que, a mi vago entender, sucedió por primera vez en la historia, mostrando la unidad internacional hacia México.


Pero, como siempre, para los mexicanos un negrito en el arroz servirá para joder al vecino, aquí los aparecidos: la blanquísima figura del coloso, inútil, sin motivo ni chiste, que se convirtió en la punta de lanza para los ataques a las ceremonias; el otro, el costo y las fallidas e inacabadas obras bicentenarias; un tercer negrito, el desplazamiento de la tradición artística de la pirotecnia nacional (en todos sentidos).

La tensión bajó después de las festividades debido al saldo blanco de éstas, pero también aumentó la problemática nacional por la emergencia que generó el paso de la tormenta tropical Karl. Con este fenómeno se triplica el número de municipios inundados y aumenta la cifra de personas dañadas. El problema es que las arcas de los gobiernos están vacías por los excesos en los gastos electorales y, al parecer, el Fondo de Emergencias, tampoco tiene dinero.

Durante ese larguísimo y atropellado puente, siguieron los escarceos del llamado al diálogo, ahora con un ingrediente extra, el llamado del presidente a la solidaridad y a que renazcan los pactos entre todos los actores de la sociedad, como los que se dieron ante la emergencia de los sismos de 1985.

Como resultado de todo este circo del Bicentenario, parece que se cocina el diálogo con el Senado. ¿Será que el Senador Manlio Fabio Beltrones logrará que el presidente se presente a dialogar oficialmente con los representantes populares, derivándose de ahí el trámite de la tan esperada reforma política?, ¿será que por fin veremos un verdadero diálogo? ¿Conseguirá el presidente que no se boicoteen, desde los grupos internos de su propio partido, los acuerdos a los que llegue con el Senado?

Ojalá termine el circo del Bicentenario y exista el diálogo, la ventana de oportunidad es corta, se termina pocos días antes de que lleguemos al siguiente momento de un nuevo riesgo público, la ceremonia del festejo de la Revolución, para lo que los grupos estarán planchando ya la reforma política, el presupuesto 2011 y la cancelación oficial de las ansias aliancistas para las elecciones del próximo año.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Liderazgo y comunicación

Tuve la oportunidad de impartir un curso sobre liderazgo social a estudiantes de una universidad pública, en el interior de la república. En un taller de este tipo, siempre se habla de comunicación, como un elemento fundamental de cómo un líder debe expresarse y conectarse con la demás gente; la comunicación, en este caso, por su orientación de visón social, adquiere características especiales.

Estas implican que el líder social deba primero, de escuchar con empatía: segundo, de hablar con autenticidad; y en tercer lugar, de controlar la ansiedad de responder.

Si analizamos cada una a detalle, en la primera encontramos que hoy es obligado escuchar las demandas sociales de la población. La digitalización de la comunicación y las redes sociales, nos obligan a todos, individuos, empresas, gobiernos y medios masivos, a escuchar con apertura y sensibilidad, los problemas de nuestros empleados o amigos, clientes, gobernados o lectores.

En el segundo caso, hoy con la información que se tiene corriendo a toda velocidad en medios o redes sociales, da la facilidad a miles de ojos, de ver las actuaciones de cualquier empresa, autoridad o persona, en línea, las veinticuatro horas de los trescientos sesenta y cinco días del año. Diariamente se hace más pequeña la ventana de los que se atreven a engañar al público.

Respecto al tercer concepto, que se refiere a controlar la ansiedad de responder, hoy implica escuchar todas las demandas sociales; tener la información completa de cada caso y pensar muy bien lo que se deba contestar. Además, también interpreto, que hoy más que nunca las promesas fáciles y espontáneas, no sirven de nada. Ya es necesario contestar con acciones claras y contundentes, más que con bonitas declaraciones huecas.

Haciendo un paralelismo entre este tipo de comunicación de liderazgo social, con la que deben de tener las empresas y los gobiernos, creo que no debe de existir ninguna diferencia. Es obligado que cada día, los comunicadores privados, sociales o gubernamentales, aprendan de este tipo de comunicación, para fomentar el liderazgo social institucional que tanto nos está demanda la sociedad.

Esta comunicación se convierte, también, en una herramienta elemental para los publirrelacionistas en su actuar diario, para complementar la parte práctica y ética de la profesión.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Infraestructura

Barack Obama acaba de anunciar que invertirá, el próximo año, un total de 50 mil millones de dólares en obra pública: construirá trenes, aeropuertos y carreteras, en resumen, crecerá y mejorará los servicios de su país. Parte de la idea es crear un banco de infraestructura que permita traer a la modernidad los trenes y las carreteras; de alguna manera, con esta medida se pretende renovar al país y activar la economía.

Está demostrado que una de las mejores formas de generar movimiento en las economías es mediante la construcción de infraestructura, pues, además de traer modernidad y conectar a las ciudades y a las personas, genera trabajo directo y movimiento social.

En Estados Unidos, el año pasado se dieron cuenta de que su rezago en lo que corresponde a las instalaciones ferroviarias, contra su competidor, Europa, es deplorable y están empeñados en revertir el atraso y avanzar rápidamente mediante de una red de pasajeros y la conexión de la red de trenes de carga.

Mientras eso pasa, en México no podemos liberar los recursos, ni las licitaciones, ni los contratos para mejorar las carreteras. Hay movimientos sociales en contra de las presas, tan necesarias, y de las aerolíneas y los trenes, mejor ni hablemos; estamos muy lejos de la mano de Dios. Hay un subejercicio terrible y no se ve forma de que se pueda avanzar en la materia.

Seguramente, los candados legales, las trampas burocráticas, los monopolios, los pleitos en el Congreso y la dificultad de las reglas del Ramo 33, por un lado, o retener las inversiones hasta que las obras se conviertan en una suculenta moneda de cambio electoral, por el otro, son algunas de las tantas excusas que tenemos en el país para no avanzar en este rubro.

Es una verdadera lástima, ya que en estos momentos, si pudiéramos incentivar la economía con este tipo de inversiones, se daría trabajo a millones de mexicanos que podrían tener una mejor opción que acercarse a la delincuencia organizada. También, como país, estaríamos alineándonos a un gran esfuerzo con nuestro vecino del norte que y crear, con esto, una sinergia de bloque comercial que será motivada por un movimiento económico.

Si esta inversión se lleva a cabo en Estados Unidos y nosotros nos quedamos quietos e inertes, seguramente lo único que haremos será ofrecer mano de obra barata y hacer que nuestros migrantes nuevamente deseen acariciar el sueño americano, ya que en nuestro país no tenemos opciones.

Desafortunadamente, en México nos encontramos tan imbuidos en nuestra guerra contra la delincuencia organizada, que estamos ciegos para encontrar una salida. No encontramos el camino correcto para terminarla, porque todos nos llevan a entregar la plaza o a seguir enfrentados y perder la guerra contra una fuerza invisible y más equipada.

Tal vez un camino que no hemos explorado aún, para salir de esta guerra, sería hacer un gran pacto nacional y liberar, fuera de la visión electoral y de la lucha por el poder, la inversión en infraestructura. Para esto es necesario eliminar los egos políticos y crear un verdadero fondo de infraestructura en un plan de Estado y con visión al año 2020, para crear y asegurar la inversión, para terminar con los problemas actuales de comunicación y con la idea de conectar y hacer crecer a las ciudades más importantes, para que esto logre enlazar comercialmente a todo el país, que crezca el comercio y, si se hace con la visión de bloque comercial, puede hasta aumentar el comercio internacional.

Obviamente, esta idea central puede detonar que aumentemos toda la infraestructura de telecomunicaciones y del manejo de energía, que con un buen plan central y sin grandes complicaciones, puede traer hasta inversiones extranjeras y un aumento de la competitividad del país, que por más que hacemos, sigue cayendo en los indicadores internacionales, por esa gran necedad de las mentes monopólicas.

Es muy curioso que, en este año del Bicentenario, realmente se hayan hecho muy poca obra de infraestructura, si la comparamos con la celebración de 1910 que encabezó Porfirio Díaz; aún estamos gozando de toda la obra en trenes, ciudades y monumentos que se realizó en aquel tiempo.

Hoy, en esta celebración, no somos capaces ni siquiera de terminar un súper arco con tecnología de punta, para dejar muestra de esta celebración a nuestras futuras generaciones.

Puede sonar muy simple esta propuesta, pero ante la situación de enfrentamiento contra la delincuencia, parálisis legislativa y necedad política, cualquier camino se merecería ser explorado, sobre todo por el bien de México.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Las RP y la visión de negocios

El gran reto de los profesionales de las Relaciones Públicas es aprender a adecuar los objetivos de las campañas hacia los de negocio de la empresa y que sean medibles. He visto, a lo largo de todos estos años que sólo se orientan a cumplir aquellos de la comunicación, y en general son: aumentar el posicionamiento, crear awareness, etcétera, etcétera, y de ahí parten, para hacer estrategias, actividades y acciones.

Lo malo en esto son dos problemas, el primero, es que los objetivos son imposibles medir; al publirrelacionista tradicional no le vendieron la idea de que su trabajo debe ser contabilizado de alguna forma. El segundo, es que las compañías no invierten dinero para medir el awareness o el posicionamiento, de ahí que lo más fácil fue contabilizar el aumento del número de notas periodísticas publicadas a partir del plan impulsado.

Reto a los comunicadores a cambiar su visión y prueben, a partir de ahora, a trabajar con los objetivos de negocio para hacer que realmente las RP ayuden a pre-vender algún producto o servicio, o a cambiar la actitud del consumidor hacia alguna marca. Esto, por supuesto, no significa anuncios gratis; pero sí, de lograr que el público entienda tendencias, beneficios y todo lo que existe alrededor de una marca o compañía a fin de que perciba un valor agregado por las características en la producción de su materia prima, procesos, etcétera.

De ahí, las estrategias serán totalmente de comunicación así como las actividades, de esta forma veremos la manera de lograr objetivos más medibles y darle el verdadero valor a las relaciones públicas.

En la medida que saquemos a las relaciones públicas de sólo contar historias en los medios de información, haremos valer todos los esfuerzos que nuestra profesión y la comunicación en general puede hacer por las empresas, productos o instituciones. Técnicamente habrá que dejar de ver que todos son medios, hoy las redes digitales han demostrado que el humor y el interés de las personas empieza a desviarse al valor del llamado social y ahí es en dónde hay que empezar a contar las historias.

Hoy más que nunca brindar experiencias con determinados productos o servicios es lo que realmente empieza a valer en el mundo de las compras y preferencias de los artículos. Hace diez años cuando empezaba internet, decíamos que teníamos un consumidor educado que brincaba por la información que tenia; hoy en las redes sociales la experiencia de compra o de marca es lo que lleva a la adquisición. Todo lo investigamos en internet, lo que no está ahí, simplemente no existe, hasta los medios ya lo saben. Estamos en el momento en que la comunicación comercial se esta autodefiniendo y aún no sabemos hacia donde va.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Las RP no son gratis II

Como resultado del artículo anterior, Las Relaciones Públicas no son gratis, recibí varios comentarios solicitándome que escribiera una continuación, pero desde un punto de vista distinto. Para hacer honor a estas peticiones, aquí está la segunda parte enfocada a comentar qué pasa cuando los Presidentes o Directores de las empresas tienen esta creencia distorsionada sobre la disciplina.

En mi experiencia como consultor, podría generalizar que entre los ejecutivos que tienen ésta percepción sobre las relaciones públicas, hay dos tipos de actitudes: la primera, es la de aquel que entiende que la comunicación es un dolor de muelas y no sirve de nada. Este directivo usualmente es poco comunicador, parco, le cuesta trabajo el trato con la gente y, por ende, no entiende que para administrar una empresa la comunicación técnicamente implica una parte importante del management. Como no lo concibe, no va a comunicar su visión a sus empleados y, si ampliamos esto a la empresa, tampoco logrará que su compañía se comunique con los consumidores y ni mantendrá una buena relación con la sociedad en la que produce, vive y convive.

El segundo caso aquel típico directivo quien cree que por tener una posición de alto rango y conocer a determinados periodistas, le es suficiente para generar la información requerida para atender a todas las necesidades de los stakeholders de la empresa. Se confía en sus habilidades de comunicador y sólo alcanza a informa a su primer círculo; en el fondo, subestima a su equipo de comunicación y no los deja hacer su trabajo adecuadamente por creer que las noticias son únicamente cuando él las genera.

Hoy cualquiera que sea el tamaño de la empresa, la comunicación y las relaciones públicas son una función administrativa de la organización. Debe de tener objetivos, estrategias y metas, y estos no son de comunicación, se trata de objetivos de negocio. En este terreno hay que decir, también, que los publirrelacionistas necesitan aprender a definir sus objetivos con visión de negocios para hacer que la comunicación logre los objetivos de ventas de la empresa.

Si queremos dejar atrás el mito de la gratuidad de las RP, ambas partes deben de aprender a conjugar los esfuerzos y hacer que la comunicación sea productiva en beneficio de la empresa y sus metas de negocios.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Cielos de Latinoamérica

Desde el espacio aéreo entre Guayaquil-Panamá-Lima.- Me encuentro en un avión surcando los cielos de Latinoamérica, pensando que nuestra región está por celebrar el proceso de Independencia; un bicentenario obliga, por lo que se anuncian diferentes festividades. Hace algunos días, en un programa de radio, me hacían una pregunta que hoy sigue dando vueltas por mi mente a 30,000 mil pies de altura y con una visión no solamente de la celebración en México: ¿Qué celebramos?, o dicho de otra manera, ¿debemos celebrar?

Hace algunos meses, en otra entrevista, ante la misma pregunta afirme que sí, que como país tenemos muchos avances y una cultura de la cual enorgullecernos. Hoy, no es que se haya perdido todo eso, pero los nubarrones que nos ofrece la inseguridad, la miseria política, combinada con una mezquindad electorera, la ambición que generan todo tipo de monopolios creados y la indiferencia popular, empañan los logros que, como país y civilización, tenemos.

A nivel Latinoamérica, el panorama es parecido, ¿Qué vamos a celebrar? ¿El deterioro de nuestras economías después de una gran crisis mundial, o la disminución democrática por los nuevos aires dictatoriales disfrazados con un “bolivarismo” rampante, o el mantenimiento de los monopolios del poder, o la falta de visión de estado, o la falta de certeza jurídica o inseguridad en los diferentes países?

No todo es malo, en algunos países se ven avances, pero no acabamos de consolidar nuestras democracias para que verdaderamente podamos dar un salto cuántico en el desarrollo económico. En el umbral de una tercera revolución industrial, nuestros países se ven lejos de poder lograr dar ese gran paso, arrastramos una gran pobreza que no nos permite retomar el rumbo adecuado.

El continente ha entrado en un espiral en donde la delincuencia organizada se ha convertido en una pandemia y, al mismo tiempo, desafortunadamente, ha generado un mercado paralelo que está activando las economías, al mismo tiempo que se ha convertido en un impuesto perverso a la población, que tiene que pagar protección. Como consecuencia, esta actividad vulnera a las instituciones, desgasta a los gobiernos, se generan pérdidas de vidas humanas y se pierde el enfoque de la nación por el desgaste de una guerra operativamente cara, logísticamente compleja y que la corrupción y la injusticia empeoran.

En nuestro México además, este mes es significativo: se cumplen diez años de la alternancia, diez años de la llegada de la derecha al poder, cuatro años de Calderón como Presidente, diez años que el PRI trata de gobernar desde las cámaras; se presenta el cuarto informe presidencial, se abre la nueva sesión del Congreso, y se empieza a discutir, como todos los años, el paquete fiscal y presupuesto del próximo año. Se discuten impuestos, se habla de las reformas que nunca se aprobarán y, por supuesto, se llevarán a cabo las ceremonias de la fallida celebración del Bicentenario, en donde los aliados electorales de ayer y quién sabe si de mañana, se disputan los monumentos nacionales para hacer sus celebraciones Bicentenarias.

Mientras México, ante ojos de Latinoamérica empieza a levantar lástima, las únicas noticias que se ven en los medios de la región son la de los narcos y los muertos. La gente, pasmada, no puede creer lo que están viendo en la televisión, reportes de muertos, bombazos, capturas de narcos. Quedó atrás ese México alegre, dinámico, pletórico de avances y de liderazgo regional; ahora sólo levantamos pena y frustración por nuestro país, otrora considerado tan bello, pero cuya imagen vista por la gente a través de su televisión es hoy otra. Ante este escenario en México, las recomendaciones de seguridad y cuidado que normalmente se hacen en hoteles de algunas ciudades y países de la región, no suenan graves.

Y la siguiente duda que repiquetea en mi mente es ¿Qué hacer como ciudadanos? ¿Podemos hacer algo? Y ante eso, sólo me queda decir que no debemos de cejar en hacer las cosas bien y de la manera correcta; el sábado pasado, Lorenzo Zambrano, Director de Cemex, en su twitter escribía que no saldrá de la ciudad Monterrey, a pesar de la situación tan extrema; ayer Don Manuel Arango, en un escrito titulado “El México invisible”, decía que los millones de mexicanos que trabajan y mantienen al país pertenecen a la población de la cual los medios no hablan, son invisibles, pero son los que mantienen al país y son los que podremos gritar con orgullo, ¡viva México¡, en estas fechas; ambos tienen razón, pero también esos mexicanos no tienen otra opción. En el norte hay funcionarios del gobierno y alcaldes que, de plano, viven en Estados Unidos y se cruzan para cumplir sus obligaciones, debido al miedo. En otros casos, hay familias que pudieron cambiar su residencia a otras ciudades.

Desde los cielos de Latinoamérica, considero que la mejor celebración que podemos hacer, es la de seguir trabajando por mejorar las cosas, cumpliendo con nuestras obligaciones como ciudadanos, no cediendo al camino fácil de la corrupción y aplicando tolerancia cero a lo que atente contra nuestra seguridad, nuestro país y nuestra región.