martes, 28 de enero de 2014

Reclamo



¿Son el PAN y el PRD partidos de derecha e izquierda hoy? ¿Dónde perdieron la brújula política?

La semana pasada recibí la llamada de un muy estimado amigo, del cual respeto mucho su opinión sobre asuntos políticos, entre otras cosas, y me comentó que estaba de acuerdo con el planteamiento general de mi artículo de la semana pasada, pero que había un solo punto con el cuál no coincidía. En honor a su comentario, le pedí que si me hacia favor de mandarme por mail su opinión, la cual aquí reproduzco por estar de acuerdo en su apreciación.

“Sólo hay una cosa en que no coincido, en el hecho de los extremos de derecha y de izquierda, aunque para efectos académicos y de la descripción de la geometría política está bien. ¿Pero por qué no estoy de acuerdo? Bueno, porque pienso que ambos partidos con el paso del tiempo ya perdieron su eje ideológico, el PAN y el PRD, hoy ya no son ni de derecha, ni de izquierda.

Ambos partidos hasta hace un par de décadas, sí funcionaban con base en sus ideologías y sus acciones políticas y sociales, efectivamente sí corrían dentro del eje cartesiano que describiste en tu artículo, unos más y otros menos lejos del centro. Sin embargo, el hecho de haber llegado al poder y que ocuparan importantes posiciones políticas como gubernaturas, mayorías simples en los Congresos y alcaldías, los hicieron perder su principio ideológico y lo cambiaron por un pragmatismo ambicioso y pueril.

AMLO y su MORENA no representan a la izquierda por el simple hecho que no son de izquierda, nacieron y se forjaron en el PRI, para después tomar un rumbo en contra del sistema, pero sin la ideología formal. En el caso de Cordero, Gil, Nava  y otros Panistas más, tampoco son de derecha y menos comulgan con la ideología que plasmó Manuel Gómez Morín, son políticos advenedizos del Foxismo.

Hoy, unos y otros se ajustan en torno a un pragmatismo que persigue estar en el poder por el poder, es la única manera que se puede entender como por un lado el PRD apoya una Reforma Fiscal, pero no la Energética, y en el caso del PAN la energética y no la fiscal, pero esos si ambos buscan alianzas electorales para derrotar al PRI en las urnas. Por si fuera poco además, ambos bloquean la reforma política del DF.

El proceso histórico que nos ha hecho llegar hasta esta situación, se puede abreviar de la siguiente manera: el PAN perdió el principio ideológico cuando llegaron los neopanistas a partir de Clouthier  y la llegada de los foxistas, mientras que en la izquierda se perdió con el asalto de la Corriente Democrática al PM; Cárdenas y Muñoz Ledo cambiaron la ideología de izquierda por la del Nacional Revolucionario del viejo PRI y la izquierda se convirtió en mercenaria y clientelar.”

Mi estimado Carlos, queda plasmado tu comentario con el cual estoy totalmente de acuerdo. Y por ahí dicen que fue Carlos Castillo Peraza quien expresó en algún discurso: “no vaya a ser que cuando ganemos la Presidencia de la República, perdamos el partido”. Si así lo dijo, fue con voz de profeta.

Consultor y Analista Político



jueves, 23 de enero de 2014

Extremos de locura política



El PAN y el PRD están situados en los extremos, uno a la derecha del PRI y otro a la izquierda, lo que provoca que estén cada vez más lejos de sus electores y pierdan credibilidad.

El PAN y el PRD, en la geometría de nuestro sistema político, están situados en los extremos, uno a la derecha del PRI y otro a la izquierda. Como ya lo hemos mencionado, el PRI está al centro y, cada vez, ensanchándose tanto para un lado como para el otro. Esto hace que los partidos en los extremos estén cada vez más lejos de sus electores y perdiendo credibilidad.

El partido azul pierde adeptos por no encontrarse ya en el poder y por todas las chapucerías y malos manejos (que han sido expuestos por los mismos militantes) en una desenfrenada lucha por el control del partido y por sus procesos de elección de su Presidente. En el caso de PRD, no sólo están en el mismo proceso que el PAN, en donde también cambiarán la dirigencia, sino que, además, la escisión entre las izquierdas, principalmente el pleito con Morena, les está haciendo un gran  agujero en su futuro político.

No obstante esto, ayer escuchaba declaraciones de los dirigentes, candidatos y coordinadores parlamentarios expresando que no sólo dan risa, sino que hasta pena dan.

Por un lado, en el PRD quieren llevar a controversia constitucional el hecho de que el PRI, en conjunto con sus aliados, el PAN y el Verde, quieran meter las reformas secundarías como iniciativa preferente y exponen claramente que están en contra del 50 + 1(que implica la mayoría en el Congreso); ¿qué quiere decir esto?, que no aceptan el concepto de mayoría y punto.

Por su parte, el PAN, en este pleito enloquecido por ganar la dirigencia, hace que uno de los contendientes despotrique contra la reelección en su partido cuando, por el otro lado, ellos empujaron la reelección en Diputados y Senadores.

Como podemos ver, la incongruencia está a la vuelta de la esquina, sólo quieren que la ley se aplique cuando ellos son vencedores y sus iniciativas y verdades les convienen o favorecen: “si no es mi razón, entonces hasta controversias constitucionales armo”.

Sabemos que son simples y sencillas posiciones políticas en este juego de poder y en donde los medios juegan un gran papel para difundir declaraciones, las cuales normalmente no pasan de incendiar uno o dos días a la opinión pública, pero que, en el fondo, están dañando a México.

Ojala algún día dejen de jugar con las palabras y sean más congruentes; entonces se darán cuenta de que el juego con la opinión cada vez está siendo menos entendido y más difícil de sostener como mentira.



Consultor y Analista Político


miércoles, 22 de enero de 2014

Crisis mundial



La comunidad internacional sigue centrada en la crisis más que haciendo frente estratégicamente a las tendencias, los conductores y las oportunidades que empujan la transformación global, regional y de la industria.

El día de mañana inicia en Davos, Suiza, la reunión número 44 del Foro Económico Mundial en donde se reúnen políticos, empresarios y representantes de la sociedad. En esta ocasión se discutirá el cómo hacer “La remodelación del Mundo: consecuencias para la Sociedad, Política y Negocios". El objetivo es desarrollar las ideas, iniciativas y acciones necesarias para responder a los desafíos actuales y emergentes.

En todos los rincones de nuestra sociedad actual nos estamos enfrentando a profundas transformaciones políticas, económicas y sociales. Poco a poco nos hemos dado cuenta de que las fuerzas tecnológicas están transformando nuestras vidas; hoy, las comunidades y las instituciones están quedando obsoletas de manera muy rápida mientras que las mismas autoridades y los ciudadanos no lo perciben sino hasta que se generan crisis de gobernabilidad o enfrentamiento por las demandas sociales.

La humanidad actual cruza rápidamente las fronteras geográficas y hasta las espaciales; Marte es un tema del día y ya no asombra a nadie al mismo tiempo que el hombre está cruzando, de una manera inaudita, las barreras de género y las generacionales. A pasos agigantados se está cambiando el poder de las jerarquías tradicionales y en un abrir y cerrar de ojos se está transportando todo el poder ciudadano a las redes sociales. Sin embargo, la comunidad internacional sigue centrada en la crisis más que haciendo frente estratégicamente a las tendencias, los conductores y las oportunidades que empujan la transformación global, regional y de la industria.

Como todos los años, antes de que empiece la reunión en Davos, el Foro Económico Mundial publica el “Reporte Anual de Riesgo Global 2014”, en donde encontramos que este año las preocupaciones mundiales más importantes son diez: 1) Crisis fiscales en economías importantes; 2) Alto nivel de desempleo; 3) Crisis de agua; 4) Disparidad en el ingreso; 5) Fallas en la mitigación y adaptación al cambio climático; 6) Gran incidencia de eventos climáticos extremos; 7) Falla de la gobernanza global; 8) Crisis alimentaria; 9) Fallas en las principales instituciones y mecanismos financieros; 10) Profunda inestabilidad social y política.

Como podemos ver, las preocupaciones de mayor impacto son las relacionadas con el medio ambiente y la economía; los riesgos más interconectados entre ellos son los que corresponden a las preocupaciones económicas, riesgos fiscales y su efecto directo sobre el desempleo mundial; la tendencia que se perfila para desarrollarse y que habrá que estar vigilando en años subsecuentes es la falla en las instituciones, sin dejar de preocuparnos por la falta de liderazgos y por las diferentes formas de contaminación y el abuso de las nuevas tecnologías.

En otra óptica, de las muchas variables que se analizan el reporte también indica que existen tres áreas de riesgo que se podrán agravar en los próximos diez años; la primera, la inestabilidad y el crecimiento de la multipolaridad en el mundo, la falta de reformas, la falla de gobiernos y las amplias demandas ciudadanas pueden crear desbalances regionales o pragmatismos económicos.

En segundo lugar, el reporte hace una pregunta sobre si existe una generación perdida; con el desempleo reinante puede haber una generación con altos estudios, pero sin ninguna oportunidad de trabajo y, por tanto, sin experiencia. ¿Será bueno o malo para el mundo?

Y, en tercer lugar, el tema relevante a vigilar en los subsecuentes años es la desintegración digital; cada día hay mayores ataques al ciberespacio, siendo más fácil atacar que defender, poniendo en duda Internet, en el futuro, como un medio de comunicación o comercio confiable.

Como podemos ver, el avance del mundo también crea grandes preocupaciones. Muchos temas se discutirán, ojalá se lancen buenas iniciativas para mitigar los riesgos que enfrentaremos en los años venideros.



Consultor y Analista Político


miércoles, 15 de enero de 2014

¿Pacto o acuerdos?



El año pasado se demostró que, si hay voluntad, podemos tener acuerdos y lograr cosas benéficas para el país, pero la ambición política y la cerrazón vuelven a ganarles a los políticos mexicanos.

En el año 2013 vivimos del Pacto por México; con mucho asombro vimos cómo una iniciativa de la izquierda se consolidó en un gran acuerdo nacional para lograr los importantes cambios y las reformas necesarias para la transformación del país. Una idea se transformó en un Pacto, se formalizó, se institucionalizó, se le dio una estructura, se creó un plan de trabajo y se asignaron recursos e infraestructura. Increíblemente, se hizo política como hacía mucho tiempo nadie en este país lo lograba. El resultado es contundente, se demostró que, si hay voluntad, en México podemos tener acuerdos y lograr cosas benéficas para el país.

Pero la ambición política y la cerrazón vuelven a ganarles a los políticos mexicanos. ¿Qué será lo que les sucede para no tener coherencia ni contundencia? Les gana el berrinche y como no se logran las cosas cómo ellos quieren, entonces, como decía aquel viejo anuncio de relojes, agarro mi Timex y me voy.

Ya anunciaron las izquierdas que se salen del Pacto, pero que sí habrá acuerdos políticos; ¿de qué estamos hablando? Primero, está en juego durante los próximos meses el cambio de dos dirigencias, tanto del PAN como del PRD y, empezando el año, ya se delinea el camino que van a seguir. Los azules empezaron a lanzarse mierda ante los medios y la ciudadanía y los amarillos inician el año golpeando a Mancera, fincando enfrentamientos entre las corrientes y chocando con el recién recuperado AMLO. Vuelven los políticos a interponer sus intereses partidistas a los intereses ciudadanos y del país.

Además, no obstante, esto inicia un movimiento que pretende revertir la reforma energética, lo que no nos permite darnos cuenta de que, en el fondo, no sólo están en contra de lo que esta dicta, sino que están en contra del concepto elemental de las mayorías que es lo que da fundamento a nuestra democracia. Volvemos a la incongruencia del ranchero, reflejada en un dicho popular, que dice: “que se haga justicia, pero en los bueyes de mi compadre”. Con la reforma energética sí, con la hacendaria, que  contempla a la mayoría, no.

Es increíble que, después de vivir un año con Pacto, ahora los políticos quieran regresar al mundo de los acuerditos políticos de conveniencia y, seguro, celebrados en lo oscurito. Mal o bien, el Pacto estaba bien difundido y, más o menos, eran transparentes sus acciones; además de tener mucha presión pública, sus acuerditos no van a ser así.

Desafortunadamente, ésa es la pobre visión de los políticos mexicanos. En fin, ya veremos en qué terminan los acuerdos del 2014.

Consultor y Analista Político