Discursos a modo

Ya estamos por completar la terna de los aspirantes a la Presidencia de la República, siendo los del PAN los últimos en definir su candidato, quien, si todo va como la lógica dice, será una mujer; si el proceso se complica y se van a una segunda vuelta, es seguro que quede quien quede, lo único que asegurarán es su salida de Los Pinos; mismo caso cuando los priistas se pelearon a muerte por la nominación.

El caso es que entraremos de lleno a la campaña y, para cómo se ven las cosas, ya los discursos empiezan a perfilarse muy claramente, en todos los partidos y todos los candidatos ya tienen listos sus discursos y que vienen a ser a modo  de cada grupo que votará.

En el caso del PAN, ya vimos que lo que van a decir es que harán todo para que no regrese el coco del PRI, que ellos son una maravilla gobernando y que gracias a ellos se ha mantenido la economía; de ahí nadie los va a bajar, le hablarán a los viejos y nuevos panistas, pidiéndoles su voto para que sigan defendiendo los preceptos morales de la sociedad, la legalidad y la visión empresarial. En contra tienen los últimos actos que quiera hacer Calderón, la baja de popularidad con la que abre la campaña electoral el Presidente y la guerra contra el narco y los muertos, además de los jinetes del apocalipsis que parece que persiguen a este mandato del PAN.

Por su parte el PRD, Morena, el PT, y el antiguo Convergencia, siguen por dos rumbos que han marcado hasta ahora. En voz de ciudadanos, hablar de que ya están cansados de los mismos y que es necesario el cambio;  por el otro lado, la república del amor, la ética y una buena embarrada del poder ciudadano, no mucho porque no les conviene, pero algo dirán, se alejan de los enfrentamientos y de las malas historias del pasado, el discurso será de perdón, de armonía y de todas las dulzuras que puedan permitir los ataques del adversario. Puede ser que, ante alguna provocación, cedan a la tentación de regresar al golpeteo hacia las instituciones y llegar a una incongruencia entre lo que dicen y lo que hacen. Obviamente, es ahí donde  los adversarios van a poner el mayor empeño. En este caso, va a ser curioso ver a los mismos actores que fueron vapuleados con escándalos en tiempos pasados entrar a competir por escaños en las cámaras y estar en campaña. Veremos si la opinión pública tiene memoria.

En el caso del PRI, el mensaje será el buen gobierno, lo que se logró cuando ellos estuvieron en el poder, la antigua y sólida historia de las instituciones, y una visión de porvenir; en este caso habrá que ver cómo funcionará el fuego amigo que, a pesar de que ha estado muy activo, aún no empieza de lleno a disparar para defender sus posiciones. Por el lado de los demás enemigos del PRI, habrá que ver qué posiciones y persecuciones estará ordenando el PAN, en el gobierno, para desprestigiar el discurso y bajarlos de las preferencias.

En el caso de las candidaturas ciudadanas, el discurso está muy claro, todo estará salpicado de beneficios a los ciudadanos, jugarán con la ilusión de que por fin se llegará a que el poder ciudadano alcance el poder, se cansarán de gritar que los políticos están alejados de la ciudadanía y que ellos serán la salvación del estado y la república, por el simple hecho de ser ciudadanos incorruptibles.

Finalmente, habrá que ver cuál será el discurso del PANAL; ése es el único que a la fecha no ha abierto sus cartas, seguro deberá ser en el sentido de la educación, pero cada día más ese terreno es más estéril y muy delicado por los resultados del tema en el país y por la posición de la maestra Gordillo y el sindicato en el terreno político. También, es claro que dependerá mucho de quién será su candidato o candidata, si es alguien ciudadano tomará el camino fácil ya mencionado, si es un político, tendrá que ir, irremediablemente, por el camino de dignificar a la política y rescatar los viejos valores, siempre y cuando tenga la estatura y la congruencia con su historial político.

En fin, como se puede ver, tendremos un poco de todo. A eso, súmele, el discurso de los candidatos para diputados federales, senadores, asambleístas, presidentes municipales o delegados, en algunos casos, gobernadores y hasta diputados locales; eso es lo malo de las elecciones concurrentes.

Vamos a tener discursos a modo, y para aventar p’arriba. ¡A divertirse con tanta propuesta, las cuales, si las juntáramos todas, suerte y sale un buen discurso para hacer un mejor país! ¿Será?